jueves, 18 de marzo de 2010

EL KIWI



Rico en fibra y minerales como el potasio y el magnesio, el kiwi es una fruta completa. Tiene el doble de vitamina C que las naranjas y un importante aporte de ácido fólico.


El consumo de fruta, según los nutricionistas, es más bajo en términos generales del que debiera tenerse. Los niños son especialmente los más perjudicados por la falta de ingesta de este alimento básico y precisamente el aumento de los datos de obesidad en este sector de la población son más altos por malos hábitos en la alimentación.
El aporte de vitamina C para un organismo en crecimiento es muy importante, pero también lo es cuando estamos atravesando intensos momentos de estrés y sobreesfuerzo físico.


Las frutas son fundamentales para conseguir un aporte de vitaminas esenciales para nuestro organismo. La vitamina C tiene un papel esencial a la hora de estimular y fortalecer las defensas; ayudar en la formación de colágeno y desarrollo de dientes y encías; favorecer la absorción del hierro y un alto poder antioxidante.

Si la pereza se apodera a la hora de tomarlas le recomendamos una: el kiwi, que por sus propiedades nutricionales con una sola pieza puede conseguir más vitamina C que incluso con las naranjas.

A pesar de que muchos la consideran una fruta tropical, el kiwi es originaria de China. Su piel marrón aterciopelada esconde una jugosa pulpa de verde esmeralda intenso con pepitas negras situadas de manera circular.


Vitamina C
A esta se unen dos variantes: el Kiwi rojo y Kiwaï. La Asociación para la Promoción del Consumo de Frutas y Hortalizas ´5 al día´ define al primero como una variedad aún con poca trayectoria, lo que lo convierte en un producto muy especial. Su aspecto es similar al kiwi gold en el exterior. En su interior, el corazón está coronado por semillas y pulpa roja.

Según los últimos estudios sobre este producto, el nivel de antocianinas (sustancia antioxidantes) es mucho mayor en el kiwi rojo que en el tradicional. Por su parte, el Kiwaï o kiwi baby es muy parecido al kiwi tradicional, pero del tamaño de una uva. Su piel es suave, fina y sin pelos, por lo que puede consumirse a modo de aperitivo.

Aunque el kiwi no es una de las frutas tradicionalmente más consumida
s hay que tener en cuenta que "aporta el doble de vitamina C que una naranja, además de vitamina B y mucha fibra, con lo cual es una fruta que nos aporta muchos nutrientes beneficiosos para nuestra salud".

La ingesta regular de alimentos con vitamina C ayuda a nuestro organismo a mejorar la respuesta inmune ante infecciones diversas. Argumenta también que "el poder antioxidante de la vitamina C nos protege de los efectos que los radicales libres ejercen sobre nuestras células, disminuyendo el riesgo de procesos inflamatorios". La vitamina C ayuda en la formación de colágeno, huesos, dientes y glóbulos rojos. Además, favorece la absorción del hierro ingerido a través de otros alimentos.

Es especialmente adecuada para niños, ya que además de ser divertida y original, les aporta todos los nutrientes anteriormente mencionados.

Para hacerla aún más atractiva para los niños podemos combinar en una merienda el kiwi tradicional (verde) con otras variedades, como el kiwi Gold, el cual, además de color, aporta un dulzor extra.

El kiwi, como cualquier otra fruta, se puede tomar a cualquier hora del día, incluyendo después de las comidas. Es un mito o una falsa creencia, pensar que ingerir fruta después de las comidas provoca la fermentación de la misma en el estómago o nos haga subir de peso. De hecho, la mejor prueba para corroborar que comer fruta de postre es beneficioso está en que tradicionalmente la dieta mediterránea incluye fruta de postre".

Poco calórica


Como fruta de temporada se puede encontrar de octubre a marzo, y lo que más destaca de ella, es su alta riqueza en vitamina C (más del doble que la naranja). De hecho degustar uno o dos, según el tamaño, cubre las necesidades diarias de esta vitamina.

Además, se trata de una fruta poco calórica, que aporta una cantidad moderada de hidratos de carbono y azúcares, tiene gran cantidad de fibra soluble, perfecta para regular los niveles de colesterol y azúcar en sangre, así como para facilitar el tránsito intestinal.

Si lo que quiere es perder peso, también está recomendada por su efecto saciante. Es especialmente favorable para las embarazadas por su importante contenido en ácido fólico.

El magnesio también está entre sus propiedades, por lo que resulta un buen tonificante del sistema circulatorio y los músculos; aporta más potasio que el plátano con que su ingesta ayuda a reducir el riesgo cardiovascular y a regular la tensión arterial. Mejora el sistema inmunológico y aumenta las defensas del organismo.