viernes, 5 de agosto de 2011

COMER HUEVO ES SALUDABLE


México es el primer consumidor de huevo fresco para plato a nivel mundial y el sexto como productor, según el Compendio de Indicadores Económicos del Sector Avícola 2011 de la Unión Nacional de Avicultores. Cocidos, duros, pasados por agua, al "poché", los huevos constituyen un alimento que se consume desde el comienzo de la humanidad, pero que siempre ha generado polémica por sus propiedades.

Después de muchas investigaciones de la Organización Mundial de la Salud para determinar si es un alimento que aporta beneficios, se derribaron los mitos de que el huevo está terminantemente prohibido a causa de su gran aporte de colesterol y grasa.

Si bien es necesario saber que la yema de huevo es rica en colesterol ya que posee alrededor de 213 miligramos por cada unidad, sólo una parte insignificativa es de grasa saturada, aquella relacionada con el colesterol malo. La demás, es grasa insaturada, por lo tanto, aporta al llamado colesterol bueno.

Además, posee grasas poli y monoinsaturadas, las cuales benefician el sistema cardíaco. Otras propiedades importantes son los minerales: posee zinc, selenio y vitaminas A, E, y B12 y los folatos que ayudan al organismo a protegerlo contra enfermedades cardiovasculares, cáncer y diabetes.

Otra de las grandes virtudes este alimento es que poseen lectina, una sustancia que actúa en el desarrollo de la función cerebral y estimulan la memoria, por lo que es sumamente recomendado en el embarazo, además de la albúmina, que aporta proteínas de fácil digestión y alta calidad.

Según la profesora Tere Rull de la Facultad de Medicina de la Universidad La Salle, "el consumo del huevo no contribuye al desarrollo de enfermedades cardiovasculares. En algunos individuos el estado de nutrición y cardioprotección puede mejorar aumentando el consumo de huevo. Ahora sabemos que los factores que provocan las ECV son el alcohol, tabaco, sedentarismo, estrés y la obesidad".

Sin embargo, hay una advertencia importante. Debemos tener cuidado con la salmonella, que está en los desechos fecales de las gallinas y en la cáscara. La única forma de eliminarla es hirviendo los huevos a más de 62 grados.

GINGIVITIS


¿Qué es la gingivitis?

Gingivitis - una inflamación de las encías

- es la etapa inicial de la enfermedad de las encías y la más fácil de tratar. La causa directa de la gingivitis es la placa: una película suave, pegajosa y sin color formada por bacterias, que se deposita constantemente sobre los dientes y encías.

Si el cepillado y el uso diario del hilo dental no eliminan la placa, la misma produce toxinas (venenos) que irritan el tejido gingival, causando gingivitis. En esta primera etapa de la enfermedad, el daño puede revertirse, ya que el hueso y el tejido conectivo que sostienen los dientes en su lugar todavía no han sido afectados. Sin embargo, si se deja sin tratamiento, la gingivitis puede transformarse en periodontitis y provocar daños permanentes a sus dientes y mandíbula.

¿Cómo sé si tengo gingivitis?

Los signos y síntomas clásicos de la gingivitis son las encías rojas, hinchadas y sensibles que pueden sangrar cuando se cepillan. Otro signo de enfermedad en las encías es que las mismas se han retrocedido o retirado de los dientes, confiriéndole a sus dientes una apariencia alargada. La enfermedad de las encías puede provocar la formación de bolsas entre dientes y encías donde se junta la placa bacteriana y restos de comidas. Algunas personas pueden experimentar mal aliento o mal gusto recurrentes aún cuando la enfermedad no esté avanzada.

¿Cómo puedo prevenir la gingivitis?

La correcta higiene bucal es fundamental. Las limpiezas profesionales también son extremadamente importantes pues una vez que la placa se endurece y acumula, o se transforma en sarro, sólo un dentista o higienista podrá eliminarla.

Usted puede ayudar a detener la gingivitis antes que se desarrolle de la siguiente manera:

  • Cepillado correcto y uso apropiado del hilo dental para eliminar la placa, los restos de alimentos y controlar la acumulación de sarro.
  • Alimentación correcta para asegurar la adecuada nutrición de su mandíbula y dientes
  • Evitar cigarrillos y otras formas de tabaco
  • Programar controles regulares con su dentista

MITOS DEL CANCER CERVICO UTERINO


La Red Contra el Cáncer se encuentra promoviendo una campaña de Prevención de Cáncer Cérvico Uterino, para ello, ha creado la cruzada: 10 razones / 10 acciones para salvar a una mujer del Cáncer Cérvico Uterino, que permitirá se vacunen 10 mil mujeres en nuestro país.

Asimismo, invita todas las mujeres a sumarse al esfuerzo a través de una firma electrónica de petición, para Declarar el Día Nacional contra el Cáncer Cérvico Uterino en México, lo que permitirá concientizar a nuestra sociedad y a tomadores de decisiones clave en el sector salud sobre la importancia de prevenir las infecciones por VPH relacionadas con el Cáncer Cérvico Uterino, enfermedad que hoy por hoy causa a nivel mundial la muerte de una mujer cada 2 minutos.

1. Mito: El Virus del Papiloma humano (VPH) es poco común.

Realidad: El VPH es muy común, de hecho se estima que el 80% de las mujeres alguna vez en su vida cursarán con una infección por este virus.

2. Mito: La mayoría de las mujeres que tienen múltiples parejas sexuales tendrán Cáncer Cérvico Uterino.

Realidad: El tener múltiples parejas sexuales a lo largo de la vida de una mujer es un factor de riesgo para el Cáncer Cérvico Uterino. Sin embargo, las mujeres que han tenido sólo una pareja pueden desarrollar Cáncer Cérvico Uterino. Nadie puede determinar exactamente por qué una mujer lo puede desarrollar y otra no. Hay muchos factores en el desarrollo del Cáncer Cérvico Uterino.

3. Mito: Si Tú tienes el VPH, desarrollarás Cáncer Cérvico Uterino.

Realidad: No necesariamente, independientemente de la infección por VPH de alto riesgo, hay muchos otros factores que juegan un papel en el desarrollo de Cáncer Cérvico Uterino. Las pruebas de diagnóstico como la prueba de Papanicolaou son vitales para detectar cambios anormales del cuello uterino causados por el VPH. El examen del cuello uterino puede detectar cambios mucho antes de que progresen a Cáncer Cérvico Uterino. La colposcopia es otra prueba diagnóstica complementaria al Papanicolaou.

4. Mito: El Cáncer Cérvico Uterino no se puede prevenir.

Realidad: Si se puede prevenir. El Cáncer Cérvico Uterino es prevenible ya que es posible identificar lesiones precursoras del cáncer a través de pruebas como el Papanicolaou. Posterior a la vacunación contra VPH las mujeres deben continuar con sus revisiones periódicas y someterse a pruebas de diagnóstico y detección oportuna como el Papanicolaou y la colposcopia, de acuerdo a la edad de cada mujer y de las recomendaciones de su médico. La vacuna contra VPH y los métodos de detección de Cáncer Cérvico Uterino son complementarios.

5. Mito: Los condones ofrecen 100 % de protección contra el VPH.

Realidad: Los condones no ofrecen una protección del 100% contra el VPH. El VPH se transmite por vía sexual, contacto piel a piel con una persona infectada; la penetración no es necesaria para contraer el virus.

Cuando se usa un condón, sólo está protegido el pene.

En el simple jugueteo sexual otras áreas de los genitales quedan expuestos y puede haber transmisión del virus.

Es muy importante practicar el sexo seguro para prevenir embarazos no deseados y otras enfermedades de transmisión sexual.

6. Mito: Sólo a las mujeres mayores les puede dar Cáncer Cérvico Uterino.

Realidad: No, también las mujeres jóvenes sufren de Cáncer Cérvico Uterino. La aparición del Cáncer Cérvico Uterino es la consecuencia de una infección por VPH oncogénico que se ha tenido por mucho tiempo.

Hay que tener en cuenta que no existe este cáncer sin la presencia del VPH y el contagio de éste se puede dar desde la primera relación sexual.

7. Mito: La vacuna contra el VPH causante de Cáncer Cérvico Uterino es demasiado cara.

Realidad: No. Actualmente en nuestro país la vacuna es más accesible.

8. Mito: Si ya tuviste relaciones sexuales o infección por VPH la vacuna ya no te sirve.

Realidad: No, la vacuna contra VPH si te ofrece protección aún cuando ya hayas iniciado tu vida sexual y/o hayas tenido infecciones previas, ya que te ayudará a prevenir futuras infecciones. Sin duda, con la edad el sistema inmune responde en menor medida, por eso confiere diferente eficacia a una niña de 10 años que a una mujer de 35 años.