viernes, 13 de noviembre de 2009

METODO GRIENBERG


El método Grinberg estudia las patologías del individuo mediante un análisis de la planta del pie y utiliza el tacto para equilibrar el cuerpo y la mente.


Esta terapia nacida en Israel, consistente en un análisis completo de la planta del pie para detectar las patologías del individuo.
Dolores musculares, desórdenes digestivos, fatiga o dolores de cabeza, junto con crisis de ansiedad o depresiones llevan al paciente a pasar por un rosario de especialistas médicos hasta dar con la causa de la dolencia. Por el contrario, el método Grinberg estudia la patología del individuo mediante un análisis de la planta del pie y utiliza el tacto para equilibrar el cuerpo y la mente.

No a los comportamientos repetitivos
Mediante el uso del tacto, la respiración, el movimiento y ejercicios diversos, además de técnicas estudiadas para desarrollar la capacidad de prestar atención, estos fisioterapeutas enseñan a reconocer y parar comportamientos repetitivos que te limitan, realizando un cambio interior tanto en tu vida como en tu cuerpo.

Durante toda nuestra vida respondemos automáticamente ante diferentes situaciones, como la manera de movernos, de sentarnos, de respirar, pensar o hablar, y ese comportamiento repetitivo puede originar condiciones físicas crónicas, como migrañas, dolor lumbar, entre otras patologías.

Pero estos movimientos reiterativos pueden llevarnos también a producirnos nerviosismo, impaciencia, irritabilidad, preocupación y una insatisfacción permanente al no poder alcanzar nuestros objetivos y no saber cómo cambiarlos.

Para que el paciente pueda cambiar sus hábitos y no se conforme con el tópico de ¿es que yo soy así?, se inician unas sesiones de relajación, respiración y de movimiento y de cómo aquietar la mente con el objetivo de conseguir un incremento global de la atención.

Más adelante se incorporarán a tu experiencia física aquellas emociones, pensamientos y elementos de tu historial personal que quieres borrar hasta conseguir, con las técnicas aprendidas, poner fin a este comportamiento destructor de tu vida cotidiana.

El objetivo, cambiar la dirección de la energía

Siempre que paramos un hábito tenemos la ocasión de experimentar algo nuevo, ya que liberamos la energía que estábamos utilizando y podemos canalizarla hacia donde deseemos.

El resultado de esta elección se puede experimentar en distintos planos, que incluyen un incremento de la agilidad, una mayor riqueza de emociones, más precisión y determinación en la acción y una mayor claridad y libertad de pensamiento, lo que conlleva que nuestro cuerpo será capaz de encontrar una mayor sensación de equilibrio, salud y libertad.

Para solventar un problema, los fisioterapeutas aconsejan una sesión semanal de una hora y, según el caso, la terapia puede durar de tres meses a un año, aunque un dolor de hombros, por ejemplo, se reduce en un 85 por ciento en cuatro sesiones.

En definitiva, el Método Grinberg supone un método de educación para que la persona preste atención a su cuerpo ya que, "nuestra manera de andar por la vida se refleja en nuestros pies.