martes, 3 de abril de 2012

PROGESTERONA


La progesterona es una de las hormonas más importantes del ciclo femenino. Se produce principalmente en los ovarios a partir de la pubertad y en la placenta durante el embarazo, aunque también puede ser sintetizada en las glándulas suprarrenales y en el hígado.

La progesterona, junto con los estrógenos, son los responsables de preparar el cuerpo para la fecundación y el embarazo, además regulan el ciclo menstrual.

Funciones de la progesterona

La progesterona actúa principalmente en la segunda mitad del ciclo menstrual (fase lútea) desarrollando el tejido glandular de las mamas, preparando el útero para el embarazo y aumentando la temperatura basal (1-2º C) después de la ovulación.

La progesterona tiene además otras funciones importantes en el organismo:
Efecto sedante y analgésico del sistema nervioso.
Protección cardiovascular.
Metabolismo de huesos y músculos.
Estimula la producción de colágeno, aumentando la elasticidad de la piel.
Normaliza los niveles de coagulación de sangre.
Reduce la retención de líquidos.
Regula la glándula tiroides.
Reduce la inflamación.
Restablece la libido (apetito sexual)

Niveles insuficientes de progesterona como causa del trastorno hormonal

En un ciclo menstrual normal la producción total de progesterona y estrógenos es igual, está en equilibrio. Un desequilibrio en la producción de ambas hormonas causa molestias y desajustes importantes como el Síndrome Premenstrual (SPM), fibromas/miomas, quistes ováricos, entre otros. Los niveles de progesterona y estrógenos disminuyen según aumenta la edad de una mujer, particularmente durante la menopausia.

Síntomas del Síndrome Premenstrual (SPM)

El Síndrome Premenstrual (SPM) está relacionado con una insuficiencia de progesterona y un exceso de estrógenos. Afecta a un porcentaje elevado de mujeres y ocurre desde unos días antes de la menstruación hasta unos días después.

Sus síntomas son físicos, psicológicos y de comportamiento, y entre los más frecuentes figuran:

Dolor de cabeza (cefalea)
Depresión, fatiga y letargia.
Deseos de ciertos alimentos con alto contenido en hidratos de carbono.
Hinchazón del abdomen, de senos, de tobillos y de dedos.
Tensión e irritabilidad, con reacciones desmesuradas e ilógicas.
Calambres parecidos a los menstruales.
Trastornos cutáneos.
Dolores de espalda.
Pérdida del deseo sexual (libido)

Alimentación y Consejos para evitar el SPM

Se recomienda eliminar o reducir al mínimo los siguientes alimentos (sobre todo durante la semana previa a padecer los síntomas del SPM)

Carnes rojas, embutidos, lácteos y mantequillas, su alto contenido en grasa saturada favorece los procesos inflamatorios.
Alimentos procesados y ricos en sal, que favorecen la retención de líquidos.
Café y bebidas con cafeína, que favorecen la ansiedad y el nerviosismo.
Azúcares refinados (azúcar blanco, bollería…), que favorecen la eliminación de minerales importantísimos como el Magnesio.

Se recomienda seguir una alimentación rica en:

Fibra, incrementar su ingesta a través de los cereales integrales, frutas, verduras y legumbres, ayuda a regular el tránsito intestinal.
Alimentos ricos en ácidos grasos esenciales omega-3 (pescado azul, algas, aceite de lino de primera presión en frío –siempre en crudo-, nueces) y en omega-6 (frutos secos, semilla de sésamo, pipas de calabaza o de girasol, aceite de girasol de primera presión en frío (siempre en crudo), que regulan y equilibraran los niveles de progesterona y estrógenos.
Alimentos ricos en magnesio, como frutos secos, cereales integrales, semillas, legumbres y pescado, que ayudan a relajar la musculatura de la zona abdominal.
Fuentes de vitaminas del grupo B, como cereales integrales, frutos secos, levadura de cerveza, legumbres y verduras, que ayudan a regular el sistema nervioso central.
Durante los días del SPM es muy importante la realización de una actividad física diaria (deporte o caminar 60 minutos al día a paso ligero) para reducir los niveles de estrés y evitar sus posibles síntomas.

Suplementos Nutricionales

Omega-3: Aceite de lino y aceite de pescado.
Omega-6: Aceite de borraja y aceite de onagra.
Complejo de vitaminas del grupo B.
L-metionina.
Fitoterapia o plantas medicinales
Sauzgatillo (Vitex agnus-castus)
Dong quai (Angelica sinensis)
Ñame silvestre (Dioscorea villosa) Es uno de los alimentos más ricos en progesterona natural.