lunes, 13 de abril de 2009

CARDO LECHERO PARA ENFERMEDADES HEPATICAS CRONICAS



El hígado es el órgano de mayor tamaño y complejidad metabólica del organismo. Posee una enorme capacidad de regeneración, en respuesta a diferentes agresiones como tóxinas, alcohol, medicamentos y muchos otros.

Independientemente de cual haya sido el origen de la enfermedad que presenta el hígado, la meta para el tratamiento es tratar de disminuir el daño a la célula hepática y potencializar los procesos de reparación del órgano.
En 1968, científicos alemanes aislaron el Silymarin marianum, extracto de la hierba Cardo lechero/Cardo mariano (Milk thistle/Mary thistle/wild artichoke) y es ahora una de las hierbas indicadas con mayor frecuencia por los médicos europeos para el tratamiento de la enfermedad hepática.
Diferentes estudios han demostrado la actividad terapéutica del Silymarin, basada en los siguientes mecanismos de acción.
  • El Silymarin es una mezcla de flabolignans, potentes antioxidantes.
  • Cambia la estructura de la membrana externa o pared celular de la célula hepática (hepatocito), previniendo que las toxinas u otros contaminantes entren a la célula.
  • Estimula la síntesis de proteínas en la célula hepática y la regeneración de células hepáticas dañadas. El Silymarin no estimula el crecimiento de tejido hepático maligno.
  • Inhibe la enzima lipoxygenasa, que cataliza la reacción para la formación de grasas oxidadas poli-insaturadas que dañan al hígado.
  • Como antioxidante es 10 veces mas potente que la vitamina E y aumenta los niveles de glutation en la célula hepática. El glutation es un antioxidante natural intracelular, muy importante para evitar mutaciones del DNA y RNA.
  • Aumenta la enzima superóxido dismutasa. Esta enzima en conjunto con la enzima glutation peroxidasa son fundamentales en la detoxificación y regeneración de la célula hepática.
La comisión alemana (organismo que regula la prescripción de tratamientos con plantas medicinales) recomienda el Cardo lechero para el tratamiento del daño hepático por toxicidad, como soporte en las enfermedades inflamatorias crónicas del hígado y cirrosis. La hierba contiene cromo, importante para la regulación de los niveles de azúcar en sangre y otros minerales importantes para otras funciones del organismo como hierro, magnesio, manganeso, fósforo, selenio, zinc y estaño.
En estudios en animales con daño hepático por tetracloruro de carbono, tioacetamida y virus, los investigadores demostraron la efectividad del Cardo Lechero en la disminución de los efectos tóxicos, en la mejoría de la función hepática y la supervivencia.
Uno de los estudios más importantes fue llevado a cabo en Europa con pacientes que accidentalmente habían ingerido el hongo Amanita muscaria (llamado también "El Boleto del Diablo"). La muerte sobreviene en 30 a 40 por ciento de estos pacientes y es por toxicidad hepática. Sin embargo, de 49 pacientes tratados con Cardo echero en las primeras 24 a 36 horas después de la ingestión del hongo, ninguno murió.
En un estudio a gran escala realizado en Alemania en 1992 con 2,637 pacientes tratados con Cardo lechero en condiciones como cirrosis hepática, hepatitis e hígado graso, después de 8 semanas tomando el extracto estandarizado de la hierba, 63 por ciento de los pacientes habían disminuido sus síntomas en forma significativa; en 27 por ciento de los pacientes sus hígados volvieron al tamaño normal; y en 56 por ciento de los pacientes el hígado disminuyó de tamaño en una forma considerable. En 46 por ciento de los pacientes, la medición en la sangre de las enzimas hepáticas que en estos casos están muy elevadas, disminuyó.
La hierba Cardo lechero se puede tomar por largos periodos de tiempo sin peligro de toxicidad.
Si usted tiene enfermedad hepática siga las siguientes recomendaciones:
  • Siga una dieta a base de vegetales y frutas; y, sobre todo, baja en proteínas y grasas.
  • Evite el alcohol y el tabaco. No consuma suplementos de amino ácidos o proteínas.
  • Tenga mucho cuidado con cualquier tratamiento, ya sea médico o natural que esté tomando, porque la mayoría de los medicamentos tienen su metabolismo en el hígado y no es conveniente darle una mayor carga (si no es estrictamente necesario o recomendado por el médico).
  • Evite estar expuesto a tóxicos de origen industrial (vapores de autos, gasolina, solventes, etc).
  • Tome por lo menos 6 a 8 vasos de agua al día.
  • Los baños sauna o de vapor son recomendables (a menos que su médico lo contraindique). La sudoración ayuda en la limpieza de toxinas del cuerpo.
  • Tome té de la hierba Diente de León (dandelion), diurético natural que ayuda al hígado.