El jengibre es un estimulante del sistema circulatorio por lo que es recomendado para el tratamiento de várices. Se puede aliviar las várices con un té fuerte hecho con jengibre y otros ingredientes. En una taza de agua hirviendo, echa 1-2 cucharadas de jengibre fresco rallado y ½ cucharadita de flores de tilo o la parte verde del espino. Cúbrela y déjala reposar 10 minutos. Toma 3 tazas al día de esta infusión de jengibre, durante 4 semanas, para reducir la inflamación y regular el flujo sanguíneo. El té de jengibre también es recomendado para ayudar a reducir, y hasta evitar, las náuseas durante el embarazo. También puedes usar la raíz de jengibre fresco. Corta una rodajita y frótala en la lengua. Si no tienes jengibre fresco a la mano, puedes usar también las pastillas de jengibre.
