La única desventaja de las dietas y el ejercicio es que, mientras más adelgace uno, mayor se vuelve la necesidad de seguir comiendo. Esto se debe a que el cuerpo trata de reponer esa grasa perdida aumentando la sensación de hambre de cada persona. Esto a través de un proceso que involucra las dos principales hormonas del hambre: la leptina y la ghrelina.
Es hasta que el cuerpo se acostumbra a esta pérdida de grasa, que el hambre disminuye y vuelve a niveles normales. Pero mientras esto pasa, es susceptible de comer un poco de más y sufrir el famoso "rebote".
He aquí nueve supresores alimenticios en los que debe prestar atención:
1. Almendras
> Las almendras son otra gran fuente de grasas saludables, además de servir muy bien como botana o tentempié entre comidas; mientras se tenga cuidado con la cantidad, claro está.
> Nótese que los efectos supresores del hambre de las almendras y de otras nueces suelen tomar una media hora después de su consumo. Por eso es importante consumirlas antes de sentir demasiada hambre; de lo contrario, terminará comiendo algo más que sólo las almendras.
2. Salmón
> El salmón trabaja muy bien para reducir tu apetito debido a las grasas saludables que contiene. Los alimentos ricos en proteínas son los que más sacian tu hambre en el corto plazo: sin embargo, las grasas que poseen los alimentos son las que ayudan a que el hambre no regrese sino hasta horas después.
> Por lo tanto, el comer salmón te aportará lo mejor de los dos extremos: proteínas para calmar tu hambre en ese momento, y grasas saludables para no tener hambre por mucho rato.
Es hasta que el cuerpo se acostumbra a esta pérdida de grasa, que el hambre disminuye y vuelve a niveles normales. Pero mientras esto pasa, es susceptible de comer un poco de más y sufrir el famoso "rebote".
He aquí nueve supresores alimenticios en los que debe prestar atención:
1. Almendras
> Las almendras son otra gran fuente de grasas saludables, además de servir muy bien como botana o tentempié entre comidas; mientras se tenga cuidado con la cantidad, claro está.
> Nótese que los efectos supresores del hambre de las almendras y de otras nueces suelen tomar una media hora después de su consumo. Por eso es importante consumirlas antes de sentir demasiada hambre; de lo contrario, terminará comiendo algo más que sólo las almendras.
2. Salmón
> El salmón trabaja muy bien para reducir tu apetito debido a las grasas saludables que contiene. Los alimentos ricos en proteínas son los que más sacian tu hambre en el corto plazo: sin embargo, las grasas que poseen los alimentos son las que ayudan a que el hambre no regrese sino hasta horas después.
> Por lo tanto, el comer salmón te aportará lo mejor de los dos extremos: proteínas para calmar tu hambre en ese momento, y grasas saludables para no tener hambre por mucho rato.
3. Avena
> Empezar el día desayunando avena es una excelente forma de prevenir el hambre del resto de la mañana.
> La avena contiene más fibra dietética que la mayoría de los cereales; además de ser muy bajo en azúcares, por lo que tampoco tendrá un desequilibrio de azúcar en la sangre. Agréguale un poco de canela, frutas o un toque de miel para darle sabor.
4. Wasabi
> Consumir comida picante también ayuda a reducir el apetito. Por eso, la próxima vez que vayas a comer sushi o pescado, agrégale un poco de wasabi para domesticar tu hambre.
> Además de suprimir el hambre, el wasabi también es famoso por ayudar a proteger contra el cáncer y por sus efectos anti-inflamatorios.
5. Sopadepollo y verduras
> Empezar la hora de comida con una sopa es otra forma de reducir tu apetito. Los líquidos calientes, por lo general, tienden a disminuir la sensación de hambre; y gracias a que hay tan pocas calorías en una taza, puedes tomar toda la que necesites para llenar tu estómago.
> La sopa de pollo y verduras es tu mejor opción: la baja cantidad de proteínas en el pollo saciarán tu hambre por un buen rato, mientras que las verduras y el agua le llenarán casi al instante.
> Empezar el día desayunando avena es una excelente forma de prevenir el hambre del resto de la mañana.
> La avena contiene más fibra dietética que la mayoría de los cereales; además de ser muy bajo en azúcares, por lo que tampoco tendrá un desequilibrio de azúcar en la sangre. Agréguale un poco de canela, frutas o un toque de miel para darle sabor.
4. Wasabi
> Consumir comida picante también ayuda a reducir el apetito. Por eso, la próxima vez que vayas a comer sushi o pescado, agrégale un poco de wasabi para domesticar tu hambre.
> Además de suprimir el hambre, el wasabi también es famoso por ayudar a proteger contra el cáncer y por sus efectos anti-inflamatorios.
5. Sopadepollo y verduras
> Empezar la hora de comida con una sopa es otra forma de reducir tu apetito. Los líquidos calientes, por lo general, tienden a disminuir la sensación de hambre; y gracias a que hay tan pocas calorías en una taza, puedes tomar toda la que necesites para llenar tu estómago.
> La sopa de pollo y verduras es tu mejor opción: la baja cantidad de proteínas en el pollo saciarán tu hambre por un buen rato, mientras que las verduras y el agua le llenarán casi al instante.
6. Agua
> Mantenerse bien hidratado es otra cosa muy importante que debe hacer si quierse prevenir el hambre. No solo es común que se confundas el hambre con la sed, pero no estar bien hidratado también hace que te sientas más cansado; y esto ocasiona que confundamos la fatiga con la falta de alimentación.
> Si en verdad te sientes cansado por la falta de sueño, ten en mente que tu cerebro liberará una hormona que le informará a tu cuerpo que tiene hambre cuando, en realidad, no la tienes.
7. Cafeína
> La cafeína forma parte diaria de la vida de millones de personas, aunque pocas conocen su efecto supresor de hambre. Este estimulante es más conocido por su efecto energizante y tu habilidad para mantenerse despierto en esas aburridas clases.
> En dosis moderadas, debido a que se estimula el sistema nervioso, también se experimenta una reducción en el hambre.
8. Semillas de linaza
> Estas semillas se están convirtiendo en una forma cada vez más popular de conseguir ácidos grasos, además de ofrecerle una buena dosis de fibra soluble a tu dieta.
> Espolvorea un poco de estos pequeños supresores del hambre sobre yogur, fruta o queso cottage para darle a tu cuerpo un poco de ácidos grasos que mantendrán tu estómago ocupado.
9. Manzanas
> Una manzana grande proporciona cinco gramos de fibra que llenan el estómago por un periodo prolongado de tiempo.
> Además, los azúcares de las manzanas no influyen en los niveles de azúcar en la sangre como con los carbohidratos. Esto significa que no sufrirás de un altibajo de azúcar en el cuerpo que te desconcentre de tus actividades.
> Mantenerse bien hidratado es otra cosa muy importante que debe hacer si quierse prevenir el hambre. No solo es común que se confundas el hambre con la sed, pero no estar bien hidratado también hace que te sientas más cansado; y esto ocasiona que confundamos la fatiga con la falta de alimentación.
> Si en verdad te sientes cansado por la falta de sueño, ten en mente que tu cerebro liberará una hormona que le informará a tu cuerpo que tiene hambre cuando, en realidad, no la tienes.
7. Cafeína
> La cafeína forma parte diaria de la vida de millones de personas, aunque pocas conocen su efecto supresor de hambre. Este estimulante es más conocido por su efecto energizante y tu habilidad para mantenerse despierto en esas aburridas clases.
> En dosis moderadas, debido a que se estimula el sistema nervioso, también se experimenta una reducción en el hambre.
8. Semillas de linaza
> Estas semillas se están convirtiendo en una forma cada vez más popular de conseguir ácidos grasos, además de ofrecerle una buena dosis de fibra soluble a tu dieta.
> Espolvorea un poco de estos pequeños supresores del hambre sobre yogur, fruta o queso cottage para darle a tu cuerpo un poco de ácidos grasos que mantendrán tu estómago ocupado.
9. Manzanas
> Una manzana grande proporciona cinco gramos de fibra que llenan el estómago por un periodo prolongado de tiempo.
> Además, los azúcares de las manzanas no influyen en los niveles de azúcar en la sangre como con los carbohidratos. Esto significa que no sufrirás de un altibajo de azúcar en el cuerpo que te desconcentre de tus actividades.
Estos tips para calmar el hambre sólo ayudan a que disminuya la sensación por lapsos muy cortos de tiempo; lo suficiente para evitar la comida chatarra y poder llegar a casa o a un restaurante y comer algo digno de ser llamado comida.
De esta manera, puedes seguir una dieta de forma sana sin tener que sufrir por esperar a que pasen las horas para su siguiente comida.
La diferencia de estos supresores con las píldoras para bajar de peso es que las pastillas también se desharán de la grasa de su cuerpo, pero el cuerpo empezará a indicarle al cerebro que se requiere de más comida para mantener el ritmo de quema de grasa. Eso es algo que las píldoras no pueden prevenir, por lo que tendrás más hambre, y el 80% de las personas con este tipo de dietas termina pesando más que cuando la iniciaron.
Los supresores naturales bloquean temporalmente los mensajes que se envían entre cerebro y el estómago. Tu cerebro nunca recibe el mensaje del estómago de necesitar comida porque siempre tendrás algo ligero en él; ya sea una manzana, agua, salmón o almendras.
