domingo, 14 de diciembre de 2008

EL ESTRES: ESE TERRIBLE ENEMIGO


El estrés, o stress, es la respuesta adaptativa del organismo ante los diversos estresores. Esta definición corresponde a Hans Selye y es sólo una entre muchas.
El estrés es en si mismo una respuesta natural del organismo, un mecanismo de supervivencia, que nos permite reconocer el peligro ante una situación determinada y nos prepara para el enfrentamiento o la huída.
Ante una situación que nos perturba todos los órganos del cuerpo se ponen en tensión, el cerebro se pone en alerta inmediatamente enviando señales al sistema nervioso y a las glándulas suprarrenales, ubicadas en la parte superior de los riñones, estas comienzan a segregar grandes cantidades de adrenalina. La adrenalina circula por la sangre, se contraen las arterias más pequeñas, el corazón late aceleradamente, se eleva la presión sanguinea, se drena sangre de los intestinos hacia los músculos y aumenta el nivel de insulina.
El hombre primitivo pasaba por este estado de tensión extrema cuando se enfrentaba a un animal o a otros peligros, una vez resuelta la situación volvía a la normalidad por un largo período.


La vida moderna hace que las personas estén continuamente soportando grandes tensiones y el mecanismo de supervivencia se dispara varias veces al día sin que seamos plenamente conscientes de ello.
Cuando esta situación se repite durante meses o años, la energía se agota y el organismo colapsa de múltiples maneras.

Causas del estrés

El estrés puede ser físico o psíquico.
El estrés físico se produce cuando se realiza un importante desgaste de energía, en el trabajo, corriendo para cumplir horarios o llevando a cabo tareas extenuantes. Toda actividad que desborde la capacidad del individuo terminará causándole estrés.
Es conocido el estrés del ama de casa producido por las múltiples tareas y el cuidado de los niños.
Hay situaciones estresantes de por si como el cuidado de enfermos durante largos períodos. Todos hemos conocido a alguien que terminó internado luego de haber atendido a un familiar enfermo durante mucho tiempo.
El estrés psíquico lo sufren aquellas personas que tienen exceso de responsabilidades, se ven obligados a satisfacer demandas y exigencias o a resolver problemas hasta el punto de sentirse agobiados.
No todos los individuos padecen estrés por las mismas cosas ni a todos los afecta de la misma manera.
Es más propensa a estresarse la persona que es muy responsable y quiere realizar todo a la perfección.
El trabajador ” incansable” que dedica poco tiempo al descanso y mucho a sus obligaciones.
Son muy vulnerables aquellos que quieren complacer las demandas de todos y no se dan un tiempo a ellos mismos.
También están los que quieren hacer todo inmediatamente, los que quieren hacer demasiadas cosas al mismo tiempo y los que quieren que el día tenga el doble de horas para poder realizar más tareas. Esto los hace vivir en un estado de ansiedad, tensión y alerta permanentes.
Otro tipo de situaciones estresantes puede encontrarse en un ambiente de trabajo hostil, un grupo familiar conflictivo o un mal relacionamiento con la pareja.
En general es también causa de estrés todo tipo de situaciones de las cuales no se puede huir y tampoco se pueden resolver.

Síntomas de estrés

Más que síntomas son trastornos que el estrés provoca en el organismo y todos nos sentimos identificados con alguno de ellos.

* Elevación de los niveles de colesterol.
* Hipertensión arterial.
* Problemas renales.
* Gastritis, úlceras, problemas intestinales.
* Dolor de cuello y espalda.
* Ansiedad.
* Depresión.
* Dolores de cabeza.
* Disfunciones sexuales.
* Fatiga.
* Dermatitis.
* Insomnio.
* Dolor en el pecho.
* Riesgos de ataque cardíaco.

Tratamientos para el estrés

* Lo primero que se debe hacer es tratar de cambiar la conducta que ha llevado al problema, para eso es necesario acudir a la terapia psicológica.

* Es importante adoptar hábitos de vida sanos como cuidar la alimentación y el descanso.

* El ejercicio físico es fundamental para combatir o prevenir el estrés, una caminata de 30 minutos diariamente sería suficiente.

* Las técnicas de relajación y el yoga proporcionan gran ayuda en estos casos.

* Es bueno darle a todo su verdadera dimensión y dosificar el tiempo para poder disfrutar de las cosas que hacen la vida agradable.

* Busque splementos naturales como tés o estractos que le ayuden a contrarrestar los ataques de ansiedad y estrés.

CON GUSTO LO ASESORAREMOS Y LE INDICAREMOS LAS DIFERENTES ALTERNATIVAS CON QUE CONTAMOS.