Para tratar de reducir grandes riesgos en su salud y contrarrestar los efectos nocivos de los agentes cancerígenos en los productos que se ingieren, consuma más alimentos frescos naturales, fortaleciéndose de este modo su sistema inmunológico.
La cocción y conservación de los alimentos elimina gran parte de los nutrientes más relevantes, por ello de la importancia del consumo en crudo.