domingo, 18 de julio de 2010

CERVEZA Y BELLEZA


Aunque no lo creas, la cerveza no sólo es una bebida popular, también es una aliada de tu rostro y cabello.

¿Cómo ayuda la cerveza a la piel?

Las terapias con levadura de cerveza son ideales para los siguientes problemas cutáneos:

- Infecciones por hongos en zonas de piel húmeda y calurosa, sobre todo, entre los dedos de los pies, en las axilas y en las ingles.

- Forunculosis, es decir, infecciones producidas por estafilococos. Esto se traduce en espinillas o barros.

- Eccemas o inflamación de la epidermis a causa de hongos y bacterias.

Por otro lado, la cerveza posee grandes cantidades de sustancias que sirven para la piel, como el complejo de vitaminas B y algunas proteínas que cicatrizan heridas cutáneas.

¿Cómo ayuda la cerveza al cabello?

La levadura de cerveza es estupenda para un cabello brilloso y sin necesidad de utilizar sustancias químicas fuertes.

Coloca un poco de esta bebida en un recipiente y, después de lavarte el pelo con shampoo y ponerte acondicionador, rocía cerveza sobre tu pelo húmedo. Luego, enjuágalo.

Ahora bien, si quieras darle más volumen a tu cabello, puedes echarte un vaso de cerveza cuando tengas el pelo húmedo. Lo dejas reposar por 5 minutos y lo enjuagas con agua fría.

Trucos de belleza con cerveza

Si eres rubia y deseas que tu cabello tenga hermosos reflejos, rocía cerveza sobre tu pelo; esto hará que tu pelo se aclare y tenga tonos naturales.

Para conseguirlo, debes diluir la cerveza en agua y colocar la mezcla en un pulverizador. Diariamente, y después de peinarte, aplica la sustancia en tu cabello. No te preocupes por el característico olor del alcohol; en menos de una hora habrá desaparecido.

Mascarilla a base de levadura de cerveza

La mascarilla de levadura de cerveza es perfecta para hidratar tu piel cuando está muy seca.

Necesitas:

- Una cucharadita de levadura de cerveza

- Dos yemas de huevo

- Unas gotas de vinagre

- Una cucharada de nata

- Una cucharada de miel

Preparación:

- Pon la levadura en un recipiente y disuélvela en el vinagre.

- Agrega la nata, después la miel líquida y, finalmente, las yemas de huevo.

- Mezcla todos los ingredientes hasta que consigas una sustancia homogénea.

- Para aplicar, esparce la sustancia en tu rostro y déjala actuar por 15 ó 20 minutos. Después de ese tiempo, enjuaga tu cara con agua fría.