jueves, 8 de octubre de 2009

TRASTORNOS MENSTRUALES


La menstruación, regla o periodo, es un proceso normal en las todas las mujeres que es consecuencia de un ciclo que se repite generalmente cada 28 días, dura entre 3 a 5 días e inicia en la pubertad más o menos a los 10 años y termina con la menopausia alrededor de los 45 años.

Se presenta en forma de sangrado y su origen es el desprendimiento del endometrio, capa sanguínea que se forma al interior del útero y que tiene como objeto permitir la implantación del óvulo fecundado.

Este proceso normal, no es una enfermedad de las mujeres, sino una condición para poder embarazarse, sin embargo en algunas mujeres su aparición mes con mes, ocasiona diversos problemas y molestias que cuando son excesivas, requieren de una visita médica para descartar otro tipo de problema o enfermedades que provoquen síntomas similares.

Por ello y porque cada organismo es diferente, es muy importante que cada mujer conozca bien su ciclo menstrual y sepa diferenciar entre este proceso y un problema que debe ser tratado y vigilado por un ginecólogo.

Se considera “normal” un ciclo que dura entre 2 y 7 días y que aparece entre los 21 y 35 días. Fuera de estos patrones se puede considerar que la mujer tiene algún trastorno del ciclo menstrual.

No existe una clasificación precisa de los trastornos del ciclo menstrual, pero se puede dividir los problemas en grandes grupos: los del ritmo, la frecuencia y los de la cantidad.

También existe previa a la llegada de la menstruación, el síndrome pre-menstrual que en muchas mujeres ocasiona molestias como: dolor de abdomen, de cabeza, fatiga y sueño. entre otros.

Entre los trastornos del ritmo o frecuencia, están:

  • Amenorrea: ausencia de 2 o más ciclos menstruales consecutivos.
  • Proiomenorrea: ciclos de menos de 25 días o adelanto de más de 5 días en la aparición del sangrado menstrual.
  • Opsomenorrea: ciclos de más de 35 días o retraso de más de 5 días en el inicio de la menstruación.

Entre las alteraciones en la duración, destacan:

  • Polimenorrea: sangrado menstrual de más de 8 días de duración.
  • Oligomenorrea: sangrado menstrual menor de 3 días de duración.

Entre las alteraciones en la cantidad, están:

  • Hipermenorrea: aumento considerable en la cantidad del sangrado menstrual habitual.
  • Hipomenorrea: disminución marcada en la cantidad habitual del sangrado menstrual.

Entre las alteraciones en el ritmo de eliminación:

  • Reglas que se inician intensas se presentan en las lesiones que sangran por sí mismas y que habitualmente se originan en la cavidad uterina.
  • Nictomenorrea: la menstruación con predominio nocturno, se ha considerado como síntoma de cáncer endometrial. Se presenta a veces en pacientes vagotónicas.
  • Reglas interrumpidas por períodos de uno o varios días. El tipo más frecuente consiste en una menstruación que después de 3 a 5 días cesa durante 24 a 72 horas para reaparecer después, generalmente escasa, durante uno o dos días más. Obedece habitualmente a una causa endocrina pero también puede ser consecuencia de una lesión inflamatoria.

Otro tipo de sangrados anormales son: las hemorragias uterinas anormales o metrorragias, entre las que destacan:

  • Hemorragia uterina periódica
    a. Menstruación anovulatoria: se trata de mujeres con pérdidas rojas cuya periodicidad, duración y ritmo de eliminación es en todo semejante a la menstruación normal y en las que, sin embargo, la cuidadosa exploración de los ovarios o el estudio histológico del endometrio han demostrado la ausencia de ovulación y por lo tanto, de ciclo menstrual.
    Estos casos deben ser considerados como un tipo de insuficiencia ovárica (fundamentalmente generativa) probablemente secundaria a hipofunción del lóbulo anterior de la hipófisis, que es el determinante de la ovulación. El endometrio de estas enfermas semeja el aspecto de la hiperplasia glandular quística del endometrio.
    b. Metropatía hemorrágica (Schroeder): es una entidad endocrina precisa, caracterizada por hemorragias uterinas de una mucosa endometrial hiperplásica, en ausencia de ovulación y de cuerpo lúteo. Actualmente se llama "hiperplasia glandular quística del endometrio". El diagnóstico se hace por medio de la biopsia de endometrio.
    c. Hemorragia periódica intercalar: se caracteriza por pérdidas rojas que aparecen en la vecindad de la época de la ovulación (sangrado intermenstrual). Su causa es desconocida, se relaciona con la ovulación (homólogo en el ciclo estral de animales inferiores, como el macaco).

  • Hemorragias uterinas arrítmicas.
    Son cinco tipos de hemorragias extemporáneas:
    Las metrorragias que continúan a la menstruación: se caracterizan por una hemorragia prolongada que se inicia en la fecha en que se esperaba la menstruación; pueden durar de una semana hasta dos o tres meses.
    Hemorragia intercalar no periódica, que aparece entre algunas menstruaciones; está en relación con la lesión de un folículo maduro o del cuerpo lúteo, como ocurre en la torsión, la ruptura de un folículo provocado por un examen pélvico, caídas o golpes abdominales y en el curso de una inflamación pélvica (pioovario).
    La hemorragia premenstrual: pequeño sangrado que precede a la regla. Invariablemente corresponde a hiperemia pélvica premenstrual originada por erosiones, pólipos o inflamaciones del cuello uterino.
    Hemorragia después de un período de amenorrea:
    1. Complicaciones del embarazo.
    2. Complicaciones del puerperio.
    3. Metropatía hemorrágica.
    4. Traumatismo, tumores malignos o infecciones en una mujer previamente castrada. Hemorragia irregular atípica, no rítmica, en la que no se reconoce ninguna liga con el proceso cíclico menstrual, y se manifiesta como hemorragias aisladas de calendario caprichoso. Aparecen después de la menopausia.

Por lo general estos problemas son poco comunes, pero ante cualquier duda o molestia durante la menstruación o ciclo menstrual, se debe consultar al médico, sin importar la edad.

ALGUNAS PLANTAS MEDICINALES PARA EL HIGADO Y LA BILIS


Los productos y tratamientos naturistas actuales ofrecen combinaciones herbales especiales donde utilizan la sinergia de varios elementos de la herbolaria para producir productos altamento efectivos al combinar beneficios herbales de plantas de varias regiones del mundo. De esta forma es posible crear productos altamente efectivos diseñados para un problema especifico.

Cynara scolymus: Las hojas de la cynara scolymus, que es un tipo de alcachofa, son consideradas parte de la medicina natural y utilizadas como tratamiento naturista de la medicina alternativa para tanto curar las enfermedades del hígado como de la vesícula biliar. Tiene exelentes propiedades de depuración y desintoxicación.

Matricaria Chamomilla (manzanilla): Es una hierba considerada segura y útil para mantener al hígado sano, aun en tiempos de los egipcios, romanos y griegos.

Peumus Boldus: De nombre común boldo,se le hjan encontrado propiedades que protegen al higado de las toxinas. El principal ingrediente del Peumus boldus es un alcaloide conocido como boldina. La boldina actúa como tónico amargo y estimulante de la vesícula biliar . Además sus propiedades lo colocan como un ayudante para la eliminación de cálculos biliares, además el boldo de ser utilizado en las afecciones del hígado y como un hepatoprotector, es decir, para proteger al higado contra varias sustancias.

Mentha Piperita (hierbabuena): La mentha piperita estimula la función del tracto gastrointestinal. La mentha piperita aumenta también la secreción de ácidos biliares, ayudando de esta manera a la vesícula biliar. La hierbabuena posee también un efecto antibacteriano, ayuda a mejorar el insomnio y a eliminar los gases intestinales. Así mismo se le adjudica ala hierbabuena buenas propiedades para desintoxicar el higado.

Chrysactinia Mexicana (damianita, falsa damiana): Además de otras propiedades de la medicina naturista, es un exelente diuretico, por lo que limpia el higado.

DIETA MEDITERRANEA PREVENDRIA LA DEPRESION


Un estudio dirigido por la Universidad de Navarra sobre una muestra de más de 10.000 personas voluntarias concluye que la dieta mediterránea previene entre un 40 y un 50% de los casos de depresión, una enfermedad que afecta aproximadamente a un 15% de la población.
El estudio, publicado en la revista Archives of General Psychiatry, considerada la publicación más importante en este ámbito en todo el mundo, se desarrolló en España entre 1999 y 2006 sobre una muestra de 10.094 personas, más de la mitad de ellas médicos, enfermeras y farmacéuticos, que no sufrían depresión.
De ellas, han informado responsables del estudio en conferencia de prensa, 480 desarrollaron una depresión clínicamente diagnosticada y a continuación se comparó la frecuencia de aparición de la enfermedad en función del grado de seguimiento de la dieta mediterránea clásica.
El estudio concluye que quienes seguían este patrón tradicional de dieta presentaban una reducción de entre un 40 y un 50% del riesgo de desarrollar depresión, ha explicado el catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra Miguel Ángel Martínez, quien ha afirmado que estos resultados abren "posibilidades maravillosas".
Las deducciones del estudio, ha indicado, resultan coherentes con el hecho de que los países mediterráneos ostentan las menores tasas de depresión de Europa.
En este sentido, la especialista en Psicología y Psiquiatría de la Clínica Universidad de Navarra Francisca Lahortiga ha puesto de manifiesto la elevada prevalencia de la depresión, una enfermedad que sufrirá a lo largo de su vida uno de cada siete hombres y una de cada cinco mujeres, con las consecuencia de todo tipo que ello conlleva, incluidos los suicidios o tentativas de suicidio.
Por este motivo, Martínez ha subrayado la importancia de mantener una dieta mediterránea, que se caracteriza por un alto consumo de verduras, frutas, frutos secos, cereales, legumbres y pescado, con un consumo moderado de alcohol, preferentemente de vino tinto, y una reducida ingestión de productos cárnicos, sobre todo carne roja, y de lácteos.

El poder del aceite de oliva
Respecto a las causas por las que esta dieta es beneficiosa para prevenir la depresión, la profesora de Medicina Preventiva de la Universidad de Las Palmas, Almudena Sánchez Villegas, ha comentado que algunos componentes como el aceite de oliva o los ácidos grasos omega 3 pueden actuar sobre los mecanismos de acción de los neurotransmisores implicados en esta enfermedad, como la serotonina, y mejorar también la funcionalidad de las membranas de las células nerviosas.
Además, la capacidad protectora de la dieta mediterránea frente a la depresión podría asociarse con un consumo más elevado de algunas vitaminas del grupo B y del ácido fólico, presentes en los productos de origen vegetal, como frutas, verduras y legumbres.
Sin embargo, ha destacado Sánchez Villegas, en España los jóvenes están abandonando progresivamente este tipo de dieta, debido, ha precisado Miguel Ángel Martínez, a la introducción mediante estrategias comerciales "muy bien pensadas" de la llamada "comida rápida", un sector en el que "la fuerza del marketing supera a la fuerza de la ciencia".