Una toxina se define como cualquier compuesto que tiene un efecto perjudicial en la función o estructura de una célula; algunas toxinas causan efectos negativos mínimos mientras otras pueden ser fatales. Las toxinas dañan el cuerpo en una manera insidiosa y acumulativa. El cuerpo procesa naturalmente las toxinas por medio del hígado, riñones e intestinos bajos. Estos órganos deben funcionar óptimamente para que las toxinas sean eliminadas adecuadamente del cuerpo antes de que dañen el tejido. Si su sistema de desintoxicación se sobrecarga, los metabolitos tóxicos (subproductos del metabolismo) gradualmente se acumulan y causan estragos en los procesos normales del cuerpo. Ya que todos sus órganos y funciones están íntimamente relacionados, cuando los procesos básicos de su cuerpo fallan, todo su cuerpo se deteriora.
Por ejemplo, el cuerpo humano está formado por aproximadamente 60 billones de células de varias formas y funciones. Cada célula y tejido del cuerpo es alimentado por nutrientes en el torrente sanguíneo que son suministrados por los intestinos. El aparato digestivo convierte la comida en nutrientes valiosos que son absorbidos posteriormente por el cuerpo. Durante este proceso, el sistema digestivo produce una sustancia mucosa que es normalmente excretada junto con otros desechos. Sin embargo, las dietas ricas en alimentos procesados y pobres en fibras evitan la eliminación apropiada de esta sustancia. A medida que se acumulan pequeñas cantidades a lo largo de las paredes del aparato digestivo, se produce una lenta evacuación intestinal y estreñimiento.
Mientras las paredes del colon se endurecen y el pasaje del colon se estrecha más y más, el proceso digestivo de extracción de toxinas de los alimentos y su eliminación del cuerpo se vuelve ineficaz produciendo un caso de colon tóxico. La materia fecal no digerida en el cuerpo es una de las principales causas de enfermedades. Según la Dirección de Alimentos y Medicamentos de los EE.UU., un varón americano promedio de 50 años de edad tiene entre 5 y 22 libras de materia fecal comprimida atascada en su sistema digestivo. La subsecuente contaminación de los intestinos resulta en toxinas que entran en la sangre, tejidos y órganos y también los contaminan.
El órgano interno más grande del cuerpo es el hígado. El hígado trabaja filtrando directamente las toxinas, alterándolas de modo que puedan ser eliminadas en otras etapas de la desintoxicación. El hígado filtra las toxinas de aproximadamente 1 litro de sangre por minuto. Algunas de estas toxinas son endotoxinas (producidas en el cuerpo) y otras son exotoxinas (producidas fuera del cuerpo). Estos desechos son eliminados por los riñones o el colon. Otras toxinas, formadas de compuestos que son difíciles de filtrar para el hígado, deben ser descompuestas con enzimas para poder ser eliminadas. Un hígado que funciona correctamente es vital para su salud.
Una sobrecarga grave de toxinas puede producirse fácilmente. Las toxinas liberadas por el hígado deben abandonar el cuerpo vía el colon y los riñones. Si una persona está estreñida, las toxinas no son eliminadas y en cambio son absorbidas nuevamente por el hígado. Esto ocurre mientras nuevas exotoxinas son continuamente introducidas en el cuerpo mediante la medicación, los pesticidas, el humo del cigarrillo, la contaminación, las impurezas en la comida, las bacterias y otras sustancias problemáticas en el ambiente y nuevas endotoxinas son creadas en el cuerpo debido al estrés y a la falta de ejercicio.
La contaminación de la sangre resultante ejerce una enorme tensión en los riñones que normalmente procesa 200 cuartos de galón de sangre diaria para separar los desechos y mantener una sangre limpia y químicamente balanceada. No pasa mucho tiempo para que la enfermedad se manifieste debido a un hígado que funciona incorrectamente, un sistema excretorio apelmazado y un montón de toxinas que se unen a las enzimas a nivel celular y las neutralizan, de modo que las células ya no funcionan óptimamente.
Al principio, esta concentración de toxinas se expresa con síntomas menores como inactividad, dolores de cabeza y acné, pero más tarde produce dolencias que ponen su vida en riesgo como el cáncer, falla de los órganos y desequilibrios hormonales causantes de obesidad y diabetes. Un estudio llevado a cabo por la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Columbia estima que el 95 % del cáncer es causado por la dieta y la toxicidad ambiental. La mayoría de estadounidenses tienen entre 400 y 800 productos químicos en sus cuerpos, generalmente almacenados en células grasas.
| Su Sistema de Desintoxicación |
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| Colon Sano | Colon Enfermo |
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Revestimiento de
Colon Sano | Revestimiento de Colon
Dañado por Toxinas |
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| Hígado Sano | Hígado Enfermo |
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| Riñón Sano | Falla Renal |
Problemas de Salud Resultantes
Se sabe que la obstrucción digestiva, la sobrecarga del hígado, las fallas renales y la concentración de toxinas causa los siguientes problemas de salud:
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Picazón -
Falla Renal -
Pérdida de Apetito -
Migrañas y Dolores de Cabeza -
Cambios de Humor -
Calambres Musculares -
Náuseas y Vómitos -
Desórdenes Neurológicos -
Deficiencias Nutricionales -
Obesidad -
Poco Apetito -
Mala Memoria y Poca Concentración -
Envejecimiento Prematuro -
Desórdenes Reproductivos -
Problemas de Sinusitis -
Defectos en la Piel -
Prurito -
Articulaciones Duras -
Sistema Inmunológico Debilitado -
Aumento de Peso
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Medicina Tradicional
La medicina occidental recurre a medicamentos recetados agresivos y a cirugía prohibitivamente cara para tratar muchos problemas relacionados con la toxicidad del cuerpo. Estos métodos generalmente tratan sólo los síntomas de toxicidad y no las causas subyacentes. Tan pronto como deja de consumir los medicamentos, los problemas regresan y estos medicamente a menudo tienen efectos secundarios no deseados y peligrosos.
Por ejemplo, las migrañas son frecuentemente causadas por la concentración de toxinas en el cuerpo. La Amitriptilina, Desipramina y Doxepina son prescritos comúnmente para aliviar las migrañas. Sus efectos secundarios combinados incluyen visión borrosa, confusión, estreñimiento, mareo, somnolencia, boca seca, debilidad, fatiga, mayor apetito, debilidad y aumento de peso. En este caso, los efectos secundarios como el estreñimiento y el incremento del apetito aumentan el daño al tracto digestivo y fomentan una mayor concentración de toxinas y el agravamiento de los síntomas.
Otra condición relacionada con la toxicidad del cuerpo es la lenta evacuación intestinal. Comúnmente, se prescriben laxantes para el tratamiento. El Hidróxido de Magnesio es el ingrediente activo más común en los laxantes. Este químico NO elimina la acumulación de materia fecal en las paredes del colon. Sólo licúa el contenido de su intestino para producir deposiciones acuosas. Se sabe que recurrir durante mucho tiempo a éstos, debilita los músculos intestinales que sirven como motor para el sistema digestivo. Una vez más, esta teoría es contraproducente y empeora la condición que debería tratar.
Recomendaciones
Usted puede limpiar su cuerpo y optimizar su salud a largo plazo de la siguiente manera:
1) Revierta el daño - Años de una continua ingestión de toxinas han causado daños en su sistema de desintoxicación. Para ayudar a revertir esto, uun cambio de alimentación, y la desintoxicación por ósmosis inversa le ayudan, pues libera cientos de fitonutrientes que actúan a nivel molecular para eliminar los desperdicios metabólicos y las toxinas de su cuerpo, estimular y tonificar su sistema gastrointestinal, mejorar la circulación, alimentar músculos, tejidos conjuntivos y órganos vitales como el hígado y los riñones, reforzar su sistema inmunológico y calmar su sistema nervioso para restaurar el equilibrio natural y la armonía de su cuerpo.
2) Limite los Alimentos Dañinos - Evite alimentos tratados y enlatados, productos lácteos (sobre todo queso) y comida chatarra que está llena de toxinas, tiene poco valor nutritivo y carece de fibra alimenticia.
3) Coma Alimentos Sanos - Consuma muchas frutas y verduras frescas y orgánicas. Coma con regularidad comidas cocinadas en casa (sin glutamato monosódico o edulcorante artificial). La materia prima y las verduras ligeramente cocidas al vapor son las mejores por sus vitaminas y nutrientes. Los frijoles secos y otros productos secos son mejores que los alimentos enlatados.
4) Beba Agua Purificada - Use un buen sistema de filtración de agua que garantice su acceso en casa al agua más limpia posible. El agua de los suministros públicos contendrá como mínimo contaminantes de viejas tuberías y por lo general tiene bacterias.
5) Incremente su Consumo de Líquidos - El agua purificada y los zumos recién exprimidos ayudan a eliminar las toxinas de su cuerpo. De ser posible, consuma sólo caldos, purés de verduras, agua y jugos para someter su cuerpo un día a la semana a una dieta líquida y reducir la carga de su sistema digestivo.
6) Beba Tés de Hierbas - Los tés de Alholva, Eucalipto, Hierbabuena y Menta Verde ayudan a incrementar la micción y la evacuación intestinal y eliminan la mucosidad junto con los virus y bacterias atrapados de su cuerpo.
7) Trate el Estreñimiento - Tome laxantes naturales como Psyllium para garantizar evacuaciones intestinales regulares que evitan que las toxinas se acumulen en el aparato digestivo.
8) Visite un Spa - Los baños de vapor, sauna y masajes ayudan a desprender las toxinas y eliminarlas de su cuerpo.
9) Busque Relajarse - Esfuércese por dormir entre 6 y 8 horas cada noche y aparte 5 minutos diarios para meditar. Dejar que su cuerpo se recupere y relajar la mente ayuda a equilibrar su sistema nervioso y minimizar las hormonas dañinas producidas por una vida estresante.
10) Reduzca su Exposición a las Toxinas - Evite usar ambientadores artificiales, use artículos de tocador naturales (cosméticos, jabones, shampoos, pasta de dientes) y use productos de limpieza naturales.
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