La cistitis es una infección del tracto urinario que en algunas ocasiones va acompañada de la uretritis (infección e inflamación de la uretra).
Los síntomas más comunes de la cistitis son:
• Ardor al orinar y dolor después de orinar.
• Olor desagradable de la orina.
• El color de la orina es más oscuro del normal.
• Un tinte suave de sangre en la orina
• Aumento de la necesidad de orinar y disminución de la cantidad de orina.
• Dolor abdominal y lumbar.
• Fiebre, dolor de cabeza.
• Nausea, vómito.
• Cansancio, fatiga, mareo.
• Irritabilidad, inapetencia.
Factores que aumentan el riesgo de contraerla:
• Una deficiente alimentación, bajo consumo de vitamina C.
• Estreñimiento.
• Relaciones sexuales.
• Uso de diafragmas.
• Uso de tampones (menstruación).
• Productos irritantes del shampú para el baño en tina o de burbujas.
• Masturbación.
• Rascarse excesivamente el área genital.
Consejos generales para combatirla naturalmente:
BEBER AGUA PURA: es muy importante tomar al menos 2 litros de agua pura al día o más, no refrescos ni jugos procesados, agua pura, de manera que la orina se limpie y deje de estar concentrada (si esta oscura es que esta concentrada).
ALIMENTACIÓN: incluya en su dieta muchas verduras y frutas frescas, estas ayudan a depurar cualquier infección, incluyendo la cistitis. El jugo de arándanos concentrado, el de moras o el de naranja, con una cucharada de polen, son excelentes para combatir infecciones tomados por la mañana y en ayunas. Si la infección es muy fuerte, toma un diente de ajo en ayunas durante 1 mes. El jugo de zanahoria, apio y perejil son también ricos en minerales y nutren y fortalecen las vías urinarias.
EVITAR AZÚCAR BLANCA: el azúcar blanca es uno de los alimentos más nocivos que hay cuando existe infección, pues el azúcar crea un ambiente dentro del organismo que fomenta la incubación y proliferación de las bacterias. Evite en este momento lo más que pueda todos aquellos derivados del azúcar blanca y procesados como los refrescos, galletas, dulces, chocolates, bebidas azucaradas, etcétera.
LIMPIEZA: cuando vayas al baño límpiate de adelante hacia atrás, esto ayudará a impedir que la infección se agrave. Limpiarse en sentido opuesto es una de las causas más frecuentes de infección y de agravarla. Usa siempre papel higiénico de color blanco.
RELACIONES SEXUALES: antes y después de tener relaciones sexuales ve a orinar aunque no sientas muchas ganas, pues aunque sea un poco de orina ayuda a eliminar posibles bacterias en la vagina que podrían ser llevadas a la vejiga.
USO DE DIAFRAGMA: evita los usos de los diafragmas pues se ha demostrado que son una de las causas principales de infecciones en la vejiga. Procura usar otras alternativas.
TOALLAS FEMENINAS: siempre es más higiénico y saludable utilizar toallas femeninas que tampones, durante el periodo menstrual.
ROPA INTERIOR: prefiere las de fibras naturales en especial la de algodón; si es orgánico, mucho mejor. Por otro lado, mantén tus prendas secas y evita el uso de ropa muy ajustada que impida la ventilación.
FITOTERAPIA:
Tratar las enfermedades por medios naturales siempre es una mejor alternativa que simplemente sedar al cuerpo con medicamentos. La fitoterapia, además de sanar, ayuda a que el sistema inmunológico se refuerce y se active naturalmente.
La equinácea aumenta las defensas del organismo, el arrayán es un antiséptico urinario natural, el brezo es antiséptico urinario y calma el escozor al orinar. Las cerezas son diuréticas y desinflaman las vías urinarias.
El tomillo, de propiedades antisépticas, en infusión y aplicado en cataplasmas calientes en el bajo vientre, ayuda a ir al baño.
La BERGAMOTA y el ÁRBOL DE TÉ son ideales para dar baños de asiento para combatir la infección.
Causas emocionales
El enfado, la ansiedad y aferrarse a viejas ideas o soluciones son factores emocionales que predisponen al organismo para adquirir esta afección. Duele, irrita y arde “liberar”. Es recomendable procurar un pensamiento flexible, abierto y de confianza en liberar cosas innecesarias.