POR QUE NO BAJO DE PESO?

La báscula es una herramienta o procedimiento útil para medir o registrar su peso corporal y logra detectar cualquier variación del peso, pero, el problema es que no detecta si esa pérdida o aumento de peso es grasa, músculo o agua. “La bascula no miente”, es cierto, el problema real son las variaciones tan comunes y completamente normales que el cuerpo puede tener durante todo el día, pudiendo ser de 1 a 1 ½ kg , situación que comúnmente ignoramos y debe ser importante tomarla en cuenta.

1. Alimentación. Que no se esté apegando a su menú indicado, no esté combinando adecuadamente las proporciones indicadas de sus grupos de alimentos (consumo alto o moderado de carbohidratos, azúcares y derivados, grasas), poco consumo de proteínas, pobre consumo de frutas y verduras, poco consumo de agua natural, desorden alimentario presente sin comer a sus horas, pasar muchas horas sin consumir alimentos, etc. El añadir mucha sal a los alimentos y consumir alimentos procesados con conservadores con sal como enlatados, embolsados, “frituras, botanas, embutidos, ciertos quesos, bebidas alcohólicas” originan que retenga líquidos en su cuerpo y le origine un mayor peso.

2. Inactividad física, actividad física muy escasa o de baja intensidad. Si no se integra un plan de ejercicio, llevará un mayor tiempo para eliminar la grasa corporal y el ejercicio permite acelerar su metabolismo hasta un 20 a 40 % más. El ejercicio ayuda a eliminar gradualmente cualquier retención de líquidos al activar la circulación. Perderá su peso (grasa) mucho mas rápido cuando se incluye un plan regular e intenso de ejercicio, y cuando no lo hacen, su pérdida de grasa es mucho menos notoria.

3. Genética. Cada persona presenta un metabolismo diferente con una respuesta muy particular que difiere de una persona a otra, por lo que es muy importante considerarlo y aceptarlo, por ejemplo, el hombre tiene un metabolismo más rápido que la mujer y por lo general reduce de peso mucho más rápido que la mujer, existen personas que les cuesta mucho más que otras perder o aumentar de peso. No cometa el error de compararse con los demás, pues sólo acabará frustrándose. A mayor edad la pérdida de peso va siendo mas lenta.

4. Problemas y alteraciones de salud. Metabolismo lento, problemas o desajustes hormonales, trastornos circulatorios y de los riñones que originen retención de líquidos, función tiroidea alterada, quistes en ovarios, hormonas ováricas alteradas, insulina elevada, cortisol aumentado, testosterona aumentada, hormona de crecimiento disminuida, prolactina aumentada, hipogonadismo, lesión o cirugía de hipotálamo, manejo anterior con medicación para perder peso a base de derivados de anfetaminas, hormonas tiroideas, diuréticos, laxantes, etc.) por lo que es conveniente en ocasiones solicitar estudios de laboratorio específicos.

5. Inestabilidad emocional. El estrés, tensión, ansiedad moderado o intenso puede originar un desequilibrio o alteración de diversas hormonas del cuerpo que afecte el metabolismo, haciéndolo más lento de lo habitual. Así mismo puede presentar una gran ansiedad por comer cual no pueda controlar hasta que no se corrija esa situación y que muchas veces necesite ayuda profesional de un psicólogo, aun que muchas veces no lo acepte.

6. Tratamiento incorrecto. Es poco probable pero pudiera ocurrir que se este realizando una técnica inadecuada de algún tratamiento con aparatología por parte de la terapista (intensidad, área tratada, aplicación incorrecta de cabezal, colocación incorrecta de electrodos, programa escogido equivocado, frecuencia y tiempos empleados, etc.) Aunque estos no están dirigidos principalmente a perder de peso sino como moldeado corporal y reducción de medidas.

Recomendaciones especiales:

ya que cada báscula de cada consultorio, clínica, spa, centro comercial, etc. le darán un peso diferente (1 a 1 ½ kg de diferencia).

· Pesarse a la misma hora, ya que su peso puede variar dependiendo del horario.

· Apegarse a un plan de alimentación adecuada, completa, bien balanceada, sin sufrir de “hambre”.

· Evitar las situaciones de estrés para lograr mantener una estabilidad emocional y poder apegarse a su alimentación adecuada. Así mismo, evitar la tensión o angustia por el hecho de estar a “Dieta”.

· Mantener un orden y horario regular en su alimentación.

· Llevar un plan sugerido de alimentación de acuerdo a sus cantidades consumidas habitualmente.

· Integrar un programa de ejercicio regular de intensidad moderada manteniendo una disciplina constante.

· Realizarse algún estudio de laboratorio o prueba metabólica sugerida en caso de sospecha de alteración metabólica.