La psoriasis se caracteriza por el crecimiento excesivamente rápido de las células cutáneas. Cuando este proceso se desencadena las células muertas se acumulan en la superficie de la piel, produciendo el aspecto característico de la psoriasis. Para poder cortar este proceso y evitar que continúe, puedes tener a mano una serie de remedios caseros a base de plantas medicinales que podrían ayudarte.
Plantas como el diente de león consumido en forma de té o infusión, puede ser de mucha utilidad para depurar el organismo y
eliminar toxinas que puedan afectar la inmunidad. Asimismo esta planta contiene una buena cantidad de vitamina A, en forma de betacarotenos. Esta vitamina actúa como antioxidante reduciendo la formación de radicales libres, que pueden potenciar la aparición de psoriasis. Por otra parte, el uso tópico del extracto de regaliz mejora la acción de los tratamientos convencionales contra la psoriasis.
El saúco es otra planta que posee propiedades antiinflamatorias y bactericidas. El consumo diario de 3 tazas de infusión de una cucharada de flores de saúco, puede utilizarse como remedio casero contra la psoriasis. Otra de las plantas para la psoriasis es la fumaria, el té de 1 cucharada de hojas de fumaria contiene flavonoides y mucí
lagos que ayudan a eliminar impurezas y depurar el organismo.
Otros de los remedios caseros contra la psoriasis es la aplicación externa de un vaso de infusión de una cucharada de flores secas de lavanda. Esta planta posee propiedades antisépticas, siendo muy eficaz para el tratamiento externo de lesiones de piel.
Por último, la aplicación de compresas de té de genciana o neem sobre
la zona afectada, evita la descamación de la piel.
Todas y cada una de estas plantas medicinales actúan reduciendo y
previniendo la aparición de psoriasis. A través de su utilización tanto externa como interna, estos remedios caseros pueden ayudarte a complementar los tratamientos convencionales contra la psoriasis.
