La Secretaría de Salud y el Hospital Infantil lanzaron una alerta para que en estos días los padres de familia vigilen la alimentación de sus hijos y eviten la comida y las bebidas chatarra, ya que se estima que los niños suben de peso de 3 a 5 kilos durante las vacaciones. Ver Noticias:
Para los especialistas, esto es resultado de una baja en la actividad física y más horas ante el televisor, combinadas con el consumo de comida y bebidas chatarra.
Este esquema es precisamente el que promueven con gran intensidad las empresas procesadoras de alimentos y bebidas que se anuncian en televisión. La embestida publicitaria en estos días es tan brutal que incluso arrasó con los compromisos de las propias empresas de “autorregular” su publicidad bajo criterios éticos.
Sólo por citar algunos ejemplos:
Nesquick dice ser más que leche y “Mucho más que vitaminas”, y propone a los niños beberlo “porque necesitas ser feliz” (da por sentado que lo saludable hace infelices a los niños).
Barcel de Bimbo concentra sus anuncios en la promoción de objetos Transformers y apenas menciona qué alimento es el que comprarán los niños (el producto se convierte en el complemento del juguete o la estampa).
Carlos V propone que los niños sigan jugando y no pongan atención a su madre.
Coca-Cola con sus anuncios de “El típico” y “Toma un trago de: lo hago” sugiere que sólo bebiendo este refresco se actúa y se es parte de la colectividad.
Muchos de estos mensajes también manipulan las preocupaciones de las madres:
Kellogg’s sugiere ser lo mejor para los niños y la mejor opción de compra, pues “No cuesta tanto nutrir a tu familia” (aunque el 40% de estos productos sea azúcar).
Danonino dice formar huesos “sanos y fuertes”.
Jugos Del Valle chantajea: “Haces todo por tus hijos” y propone darles “Lo mejor de las frutas” (aunque fruta sea de lo que menos contienen estos productos). Y si queda alguna duda, ofrece premios en efectivo.
Nutrimilk de Hersheys dice ser “rico, rápido y sabroso” y recomienda a la madre: “Que tus hijos crezcan con algo sabroso” (acaso lo realmente saludable sabe horrible).
Pharmaton promueve el complemento vitamínico Kiddi Pharmaton contra la desnutrición infantil (en vez de una alimentación saludable y balanceada).
Varios estudios han encontrado que la publicidad televisiva de comida y bebidas chatarra está relacionada con los problemas de sobrepeso y obesidad.
Por esa razón los gobiernos de países desarrollados han decidido acotar ese tipo de publicidad.En México no hay control al respecto. De hecho, en nuestro país es donde los niños están expuestos al peor bombardeo publicitario de comida y bebidas chatarra.
Por eso es necesario modificar esa situación y comenzar a recuperar los mejores hábitos alimentarios y de salud nutriciona
Para los especialistas, esto es resultado de una baja en la actividad física y más horas ante el televisor, combinadas con el consumo de comida y bebidas chatarra.
Este esquema es precisamente el que promueven con gran intensidad las empresas procesadoras de alimentos y bebidas que se anuncian en televisión. La embestida publicitaria en estos días es tan brutal que incluso arrasó con los compromisos de las propias empresas de “autorregular” su publicidad bajo criterios éticos.
Sólo por citar algunos ejemplos:
Nesquick dice ser más que leche y “Mucho más que vitaminas”, y propone a los niños beberlo “porque necesitas ser feliz” (da por sentado que lo saludable hace infelices a los niños).
Barcel de Bimbo concentra sus anuncios en la promoción de objetos Transformers y apenas menciona qué alimento es el que comprarán los niños (el producto se convierte en el complemento del juguete o la estampa).
Carlos V propone que los niños sigan jugando y no pongan atención a su madre.
Coca-Cola con sus anuncios de “El típico” y “Toma un trago de: lo hago” sugiere que sólo bebiendo este refresco se actúa y se es parte de la colectividad.
Muchos de estos mensajes también manipulan las preocupaciones de las madres:
Kellogg’s sugiere ser lo mejor para los niños y la mejor opción de compra, pues “No cuesta tanto nutrir a tu familia” (aunque el 40% de estos productos sea azúcar).
Danonino dice formar huesos “sanos y fuertes”.
Jugos Del Valle chantajea: “Haces todo por tus hijos” y propone darles “Lo mejor de las frutas” (aunque fruta sea de lo que menos contienen estos productos). Y si queda alguna duda, ofrece premios en efectivo.
Nutrimilk de Hersheys dice ser “rico, rápido y sabroso” y recomienda a la madre: “Que tus hijos crezcan con algo sabroso” (acaso lo realmente saludable sabe horrible).
Pharmaton promueve el complemento vitamínico Kiddi Pharmaton contra la desnutrición infantil (en vez de una alimentación saludable y balanceada).
Varios estudios han encontrado que la publicidad televisiva de comida y bebidas chatarra está relacionada con los problemas de sobrepeso y obesidad.
Por esa razón los gobiernos de países desarrollados han decidido acotar ese tipo de publicidad.En México no hay control al respecto. De hecho, en nuestro país es donde los niños están expuestos al peor bombardeo publicitario de comida y bebidas chatarra.
Por eso es necesario modificar esa situación y comenzar a recuperar los mejores hábitos alimentarios y de salud nutriciona
