martes, 3 de septiembre de 2013

FRUTAS QUE EVITAN LA DIABETES

Comer frutas disminuye el riesgo de tener diabetes, mientras tomar sus jugos lo aumenta. Al desayuno, ¿se come la naranja en gajos o se la toma como jugo? Uno pensaría que para la salud cualquiera de las dos opciones da lo mismo, pero un nuevo estudio lo hace pensar de nuevo.
De acuerdo con la investigación publicada en la última edición del British Medical Journal, incluir en la dieta más frutas enteras tiene una relación directa con la disminución del riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, mientras que el consumo de jugo de frutas está relacionado con un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
La diabetes es un grupo de enfermedades que se caracterizan por niveles altos de glucosa en la sangre como resultado de una producción deficiente de la hormona insulina, una acción inadecuada de la insulina o quizá ambas cosas.
En los adultos, la diabetes tipo 2 representa alrededor del 90 al 95 por ciento de todos los casos diagnosticados. Por lo general comienza como una resistencia a la insulina, un trastorno en el cual las células no utilizan la insulina apropiadamente.
En el estudio, investigadores de la Escuela de Salud Pública y la Escuela de Medicina de Harvard y de la Universidad de Singapur, analizaron los datos de tres estudios longitudinales que han seguido durante décadas los hábitos y estado de la salud de médicos y enfermeras de Estados Unidos.
Dentro del cuestionario que estos profesionales de la salud contestan periódicamente hay preguntas sobre la dieta, como cuán frecuente consume frutas y cuáles consume.
Tras el análisis, los expertos hallaron que las personas que consumen al menos dos raciones de frutas enteras a la semana reducen hasta en un 23 por ciento su riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 cuando se les compara con aquellos que casi nunca comen frutas (menos de una ración por mes).
En cuanto al jugo de frutas, los expertos encontraron que quienes toman estas bebidas una o dos veces por día aumentan su riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 hasta en un 21 por ciento, cuando se les compara con quienes comen la fruta entera.
¿Por qué sucede esto? Los científicos, liderados por Qi Sun, profesor de Harvard, creen que se debe a la rapidez con la que el cuerpo digiere los jugos, altos en azúcares naturales de la fruta.
Si bien, las frutas contienen azúcar, al consumirlas de forma entera también vienen acompañadas de un alto contenido de fibra que hacen más lenta la digestión y la absorción del azúcar, en el caso del jugo, el azúcar llega más rápido al torrente sanguíneo.
Pero si usted es un amante del jugo en la mañana, no todo está perdido. Los investigadores también descubrieron que cambiar el jugo por fruta entera, tres veces por semana, reducía en un 7 por ciento el riesgo de desarrollar la enfermedad.
Aunque el consumo de cualquier fruta entera tiene un efecto positivo en la reducción del riesgo de desarrollar la diabetes tipo 2, los científicos también determinaron que algunas frutas son más exitosas en la tarea.
En el estudio se evaluó el consumo de diez frutas bastante comunes en Estados Unidos: uvas o pasas, melocotón, albaricoques o ciruelas (o ciruela pasa), plátano, melón, manzanas o peras, naranjas, toronja, fresas y arándanos.
Curiosamente, los investigadores hallaron que el consumo de uvas, manzana y arándanos muestra un mayor impacto en la reducción del riesgo de desarrollar la diabetes.
Los científicos analizaron si se debe a la cantidad de azúcar que contienen esas frutas en comparación con las otras, pero no encontraron una relación. Según su hipótesis, pueden ser nutrientes específicos de esas frutas las que las convierten en un mejor protector contra la diabetes.