martes, 7 de febrero de 2012

MEJORANDO LA CALIDAD DEL ESPERMA


La baja calidad del esperma es el problema de fertilidad más frecuente entre el sexo masculino.

Factores causantes de la infertilidad

Factores pre-testiculares o endocrinos (Hipogonadismo, diabetes mellitus…)
Factores testiculares (Trauma, variocele, criptorquidia…)
Factores post-testiculares (Obstrucción de los conductos deferentes, impotencia, infección, eyaculación retrógrada…)
Factores espermáticos (Alteraciones de los espermatozoides, "mala calidad")
Otros (psicológicos, inmunológicos…)

¿Cuántos espermatozoides deberíamos de tener?

Los factores espermáticos se diagnostican mediante un análisis del semen que analiza diferentes aspectos de los espermatozoides.
En función de la concentración de espermatozoides, se pueden distinguir distintos tipos:

Normozoospermia: más de 20 millones de espermatozoides/ml. Ésta es la concentración establecida como "normal", pero el hecho de que un individuo presente normozoospermia no asegura que sea fértil, ya que pueden haber otras causas de esterilidad no relacionadas con la cantidad de espermatozoides.

Oligozoospermia
Leve: Más de 10-20 millones de espermatozoides/ml.
Moderada: Menos de 10 millones y más de 2 millones de espermatozoides/ml.
Grave: 2 millones de espermatozoides/ml o menos.
Criptozoospermia: Menos de 1.000.000 espermatozoides/ml.
Azoospermia: No se observan espermatozoides.
Los niveles normales comunes en cuanto al volumen, varían entre 1.5 a 5.0 mililitros por eyaculación. En función del conteo de espermatozoides varía de 20 a 150 millones por mililitro, y por lo menos el 75% de los espermatozoides deben tener una forma normal y mostrar un movimiento normal hacia adelante (motilidad) según la OMS (organización mundial de la salud)

¿Qué podemos hacer para mejorar su calidad y cantidad?
Para conseguir unos espermatozoides fuertes y capaces de fertilizar un óvulo es aconsejable, principalmente, llevar unos hábitos de vida saludables.

Alimentación adecuada

Ingerir abundantes alimentos ricos en antioxidantes. Estos nutrientes contribuyen a evitar defectos en los espermatozoides y estimulan su motilidad (movimiento): Aceites vegetales (germen de trigo), frutos secos (almendras y avellanas), cereales integrales, arándanos, mangostán, kiwi, naranja, acerola, pimiento rojo y verde, brócoli, etc.

Ingerir suficiente zinc. Varios estudios demuestran que las deficiencias de zinc incluso por periodos cortos de tiempo pueden disminuir el volumen del semen y los niveles de testosterona: Ostras, germen de trigo, semillas de calabaza y de sésamo, mariscos, carnes…

Incorporar ácido fólico. Los estudios sugieren que los hombres con bajos niveles de esta vitamina (B9) tienen recuentos más bajos de espermatozoides: Legumbres, levadura de cerveza, germen de trigo, vegetales de hoja verde, frutos secos…

Incrementar el calcio y la vitamina D. De acuerdo con las investigaciones de la University of Wisconsin en Madison, se puede mejorar la fertilidad de un hombre con Vit D (Pescado azul, huevo, mantequilla, exposición al sol, etc.) Calcio (Alga Hiziki, wakame, kombu, semillas de sésamo, queso, algarroba, sardina en lata en aceite, tofu, leche de vaca, coliflor, etc.)
Practicar deporte sin excesos
Los excesos desencadenan ansiedad, y las rutinas demasiado exigentes pueden ser contraproducentes. El ciclismo es un deporte que disminuye la acción de los espermatozoides por la fricción ejercida en los testículos.

Evitar ropa ajustada
Ya que ejerce fricción sobre los testículos. Es mejor utilizar prendas de algodón y evitar las sintéticas.

No hacer baños demasiado largos con agua caliente
La hipertermia puede disminuir la motilidad de los espermatozoides.

Disminuir el consumo de tabaco y alcohol
Numerosos estudios han demostrado que el semen de personas no fumadoras es mejor que el de las fumadoras en términos de viabilidad y longevidad de los espermatozoides.

Esto es debido a los pesticidas con lo que se trata la planta del tabaco "afectando la membrana de los espermatozoides y su penetración en el óvulo", según López-Teijón. A parte, también se ha demostrado que las personas fumadoras, aunque pudieran tener un mayor número de eyaculaciones semanales y más activa la función del esperma, su energía se agota más rápidamente y no llega a alcanzar el óvulo.

En cuanto al alcohol, los estudios muestran que el consumo diario de vino, cerveza o bebidas con alta graduación alcohólica sin moderación puede disminuir los niveles de testosterona y el recuento de espermatozoides así como aumentar el número de espermatozoides anómalos en la eyaculación.

Estrés
El aumento del estrés está relacionado con la baja calidad reproductiva, ya que disminuye la producción de espermatozoides.

La actividad sexual frecuente renueva los espermas
La calidad del semen es significativamente mejor en los hombres con mayor número de eyaculaciones.

Peligros ambientales
La exposición a tóxicos tales como pesticidas, humos, radiación (cuidado con llevar los móviles todo el día en los bolsillos)… alteran la fisiología de los espermatozoides.