¿Qué son las enfermedades de la piel?
Son todas aquellas que atañen a la piel, desde el acné al melanoma (cáncer cutáneo). Entre ellas se incluyen enfermedades asociadas como las de las uñas, el pelo, el sebo y el sudor.
También son atendidas por los dermatólogos las enfermedades de transmisión sexual, que aunque no directamente relacionadas con la dermis sí tienen una repercusión directa, como son el SIDA y la sífilis.
Síntomas de las enfermedades de la piel
Las enfermedades de la piel son diversas y variadas así que su sintomatología también lo es. Pero podemos establecer un parámetro común. Digamos que en la mayoría de las enfermedades de la piel se producen trastornos en la dermis, como cambios en su apariencia, temperatura, color o textura.
Estos trastornos se manifiestan a través de manchas, pequeños bultos del tamaño de un grano, a veces con pus (pústula), urticaria, descamación, úlceras, etc. A veces estas señales de la piel refieren picor, quemazón o dolor.
Causas y prevención de las enfermedades de la piel
Como hemos destacado, nos encontramos ante una amplia gama de enfermedades que afectan a la piel por lo que las cusas son muy diversas. De hecho aún se desconocen las causas que producen muchas de estas dolencias.
Por otro lado el estrés y tomar el sol abusivamente o de forma poco adecuada influyen en mucho de estos problemas. La dieta y los buenos o malos hábitos de vida también se verán reflejados, en muchos casos, en las enfermedades de la piel. También es importante la sensibilidad de la piel a agentes externos ya que un buen grupo de ellas pertenecen a problemas alérgicos. De modo que evitando cualquiera de las cuestiones mencionadas o el elemento al que se es alérgico se ejerce una prevención importantísima.
Diferentes tipos de enfermedades de la piel
Algunas de las enfermedades de la piel más habituales son:
El vitíligo. Es una enfermedad de la piel que causa manchas blancas en distintas partes del cuerpo incluidos los ojos y la mucosa bucal y nasal.
El impétigo. Es una enfermedad infecciosa de la piel y que, aunque se trata con antibióticos, también podemos combatirla, a la vez, con remedios naturales.
La urticaria. Es una reacción de tipo alérgico que provoca en la piel una sensación de picor o prurito muy irritante que puede ser aguda o crónica.
Los furúnculos. Son un problema de la piel que se inicia como una prominencia ligeramente roja y muy dolorosa, después crece y se acentúan los síntomas.
Las verrugas. Son unas excrecencias o formaciones carnosas de la piel con una superficie rugosa, con tendencia a circular pero irregular. Pueden tener diferentes formas y tamaños.
Hiperhidrosis palmar (manos sudorosas). Tener las manos sudorosas en momentos de miedo o máxima tensión es natural pero cuando esto se produce de forma continua es una fuente de frustración y sensación de vergüenza personal.
Dermatitis o eccema atópico. Es una inflamación de la piel que puede presentar enrojecimiento, formación de costras, descamación y especialmente mucho picor.
La tiña. Es una infección producida por hongos que puede afectar a la piel, cuero cabelludo, pies, uñas, ingles o distintas partes del cuerpo a la vez y en forma de erupción circular (como unos parches o anillos rojos) .
La psoriasis. Es una condición crónica de la piel caracterizada por la presencia de zonas inflamadas, de color rojizo, que se cubren de escamas platinadas.
El herpes zoster. Es una infección causada por el mismo virus que el de la varicela y de hecho para padecer el herpes zoster hay que haberla tenido previamente.
Hongos en los pies o pié de atleta. Uno de los síntomas más importantes que nos avisa de un posible caso de hongos es cuando vemos que las uñas varían de textura y/o de color.
El herpes labial. Es una infección producida por un virus simple, tipo 1, que suele salir principalmente en los labios aunque también puede salir en la nariz e incluso dentro de la boca.
Interpretación emocional de las enfermedades de la piel
Están relacionadas con los miedos y la angustia. La piel representa la capa externa del cuerpo, la armadura natural que nos protege del exterior. Alguien que se siente amenazado e inseguro ante la vida.
Emoción positiva de las enfermedades de la piel
Me siento protegido y seguro. Soy capaz de afrontar las dificultades de la vida. No hay mayor peligro que la forma de afrontar las cosas y eso está bajo mi poder.
Nuestros consejos
Los países latinos por lo general disfrutamos de bastantes temporadas de sol. Por lo cual es importante tener en cuenta la salud de la piel no sólo ante el bronceado, ya que hay personas de piel sensible que sufren quemaduras con un paseo en la calle y no se tiene el hábito de protegerse. Tenga en cuenta la tolerancia a los rayos solares de su piel, las quemaduras son acumulativas y el riesgo de melanoma es mayor.
En general verá que para la medicina natural las enfermedades de la piel son, en muchas ocasiones, sólo una señal externa de que algo interno está ocurriendo. Reflexionar desde cuando nos han aparecido esos problemas o enfermedades de la piel y ver una posible relación o causa será determinante. Tratar sólo la piel es quedarnos, según el caso, en la superficie del problema.
Son todas aquellas que atañen a la piel, desde el acné al melanoma (cáncer cutáneo). Entre ellas se incluyen enfermedades asociadas como las de las uñas, el pelo, el sebo y el sudor.
También son atendidas por los dermatólogos las enfermedades de transmisión sexual, que aunque no directamente relacionadas con la dermis sí tienen una repercusión directa, como son el SIDA y la sífilis.
Síntomas de las enfermedades de la piel
Las enfermedades de la piel son diversas y variadas así que su sintomatología también lo es. Pero podemos establecer un parámetro común. Digamos que en la mayoría de las enfermedades de la piel se producen trastornos en la dermis, como cambios en su apariencia, temperatura, color o textura.
Estos trastornos se manifiestan a través de manchas, pequeños bultos del tamaño de un grano, a veces con pus (pústula), urticaria, descamación, úlceras, etc. A veces estas señales de la piel refieren picor, quemazón o dolor.
Causas y prevención de las enfermedades de la piel
Como hemos destacado, nos encontramos ante una amplia gama de enfermedades que afectan a la piel por lo que las cusas son muy diversas. De hecho aún se desconocen las causas que producen muchas de estas dolencias.
Por otro lado el estrés y tomar el sol abusivamente o de forma poco adecuada influyen en mucho de estos problemas. La dieta y los buenos o malos hábitos de vida también se verán reflejados, en muchos casos, en las enfermedades de la piel. También es importante la sensibilidad de la piel a agentes externos ya que un buen grupo de ellas pertenecen a problemas alérgicos. De modo que evitando cualquiera de las cuestiones mencionadas o el elemento al que se es alérgico se ejerce una prevención importantísima.
Diferentes tipos de enfermedades de la piel
Algunas de las enfermedades de la piel más habituales son:
El vitíligo. Es una enfermedad de la piel que causa manchas blancas en distintas partes del cuerpo incluidos los ojos y la mucosa bucal y nasal.
El impétigo. Es una enfermedad infecciosa de la piel y que, aunque se trata con antibióticos, también podemos combatirla, a la vez, con remedios naturales.
La urticaria. Es una reacción de tipo alérgico que provoca en la piel una sensación de picor o prurito muy irritante que puede ser aguda o crónica.
Los furúnculos. Son un problema de la piel que se inicia como una prominencia ligeramente roja y muy dolorosa, después crece y se acentúan los síntomas.
Las verrugas. Son unas excrecencias o formaciones carnosas de la piel con una superficie rugosa, con tendencia a circular pero irregular. Pueden tener diferentes formas y tamaños.
Hiperhidrosis palmar (manos sudorosas). Tener las manos sudorosas en momentos de miedo o máxima tensión es natural pero cuando esto se produce de forma continua es una fuente de frustración y sensación de vergüenza personal.
Dermatitis o eccema atópico. Es una inflamación de la piel que puede presentar enrojecimiento, formación de costras, descamación y especialmente mucho picor.
La tiña. Es una infección producida por hongos que puede afectar a la piel, cuero cabelludo, pies, uñas, ingles o distintas partes del cuerpo a la vez y en forma de erupción circular (como unos parches o anillos rojos) .
La psoriasis. Es una condición crónica de la piel caracterizada por la presencia de zonas inflamadas, de color rojizo, que se cubren de escamas platinadas.
El herpes zoster. Es una infección causada por el mismo virus que el de la varicela y de hecho para padecer el herpes zoster hay que haberla tenido previamente.
Hongos en los pies o pié de atleta. Uno de los síntomas más importantes que nos avisa de un posible caso de hongos es cuando vemos que las uñas varían de textura y/o de color.
El herpes labial. Es una infección producida por un virus simple, tipo 1, que suele salir principalmente en los labios aunque también puede salir en la nariz e incluso dentro de la boca.
Interpretación emocional de las enfermedades de la piel
Están relacionadas con los miedos y la angustia. La piel representa la capa externa del cuerpo, la armadura natural que nos protege del exterior. Alguien que se siente amenazado e inseguro ante la vida.
Emoción positiva de las enfermedades de la piel
Me siento protegido y seguro. Soy capaz de afrontar las dificultades de la vida. No hay mayor peligro que la forma de afrontar las cosas y eso está bajo mi poder.
Nuestros consejos
Los países latinos por lo general disfrutamos de bastantes temporadas de sol. Por lo cual es importante tener en cuenta la salud de la piel no sólo ante el bronceado, ya que hay personas de piel sensible que sufren quemaduras con un paseo en la calle y no se tiene el hábito de protegerse. Tenga en cuenta la tolerancia a los rayos solares de su piel, las quemaduras son acumulativas y el riesgo de melanoma es mayor.
En general verá que para la medicina natural las enfermedades de la piel son, en muchas ocasiones, sólo una señal externa de que algo interno está ocurriendo. Reflexionar desde cuando nos han aparecido esos problemas o enfermedades de la piel y ver una posible relación o causa será determinante. Tratar sólo la piel es quedarnos, según el caso, en la superficie del problema.