La prueba Espectrofotometría por Resonancia Magnética ha logrado determinar el tipo de sustancias nocivas que inyectan charlatanes para moldear la figura, tales como: aceites vegetales, comestibles, minerales, de coche; además de la grasa de animal, silicón líquido, entre otras; explicó Sergio González Lazzeri, Cirujano Plástico, Estético y Reconstructivo certificado por el Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, A. C.
Dentro de los efectos que produce este tipo de “pseudo-tratamientos” son la aparición de discromía, hiper ó hipocromia (aumento o disminución del color de la piel respectivamente). Además, dependiendo del estadio de la enfermedad producida ya sea por el agente inyectado y/o por el tiempo de evolución, las personas llegan a presentar alteraciones de elasticidad, esclerosis, úlceras y en los casos más graves, pérdida de órganos o la muerte, advirtió el doctor.
Por ello, el experto comentó sobre la importancia de unir esfuerzos de educación dirigidos al público en general por parte de la comunidad médica, así como de los productos que sí cuentan con pruebas científicas para su uso sin riesgos en la salud como el caso de Dysport, la toxina botulínica francesa tipo “A” para el tratamiento de líneas de expresión y distonía aprobada por la Federal Drug Administration, FDA; así como por la Secretaría de Salud en México.
“Y es que los pacientes que han sido sometidos a la infiltración de alguna sustancia, que no ha demostrado bajo ninguna circunstancia un valor positivo para la salud y que busca “modelar” ciertas partes del cuerpo, presentarán en algún momento de su vida, reacciones locales de tipo inmunológicas a la misma sustancia” explicó el cirujano.
Los síntomas más comunes son: endurecimiento del sitio inyectado, dolor, inflamación de dicha zona, episodios de fiebre, cambios de coloración de la piel, salida de material por los sitios de punción, deformidad de la zona inyectada, entre otros; es vital que se acuda de inmediato con un profesional insistiendo en que sea éste, un calificado para ello.
Los síntomas pueden presentarse a corto o largo plazo (depende del tipo, la cantidad y la respuesta inmunológica a la sustancia). Se ha visto que las reacciones ocurren en la mayoría de los casos 15 a 20 años después del tratamiento, aunque en ocasiones los pacientes acuden a consulta a las pocas semanas para solicitar ayuda.
Quienes resultan más afectados por este tipo de engaños son las mujeres jóvenes de cualquier estrato social; siendo los senos, los glúteos, las piernas y la región facial las más comúnmente afectadas. Pero no por ello se ha dejado de ver este fenómeno en otro rango de edad o género.
Consejos básicos para someterse a un tratamiento estético:
1) Que el paciente asegure que se encuentra frente a un profesional certificado por la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica, A. C.; por el Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, A. C. o por cualquier otra agrupación que cuente con un valor académico serio.
2) Es común que aquellos que hacen charlatanería no cuenten con un lugar fijo de trabajo o bien cambien constantemente su lugar de aplicación, para que no se les pueda reclamar o perseguir.
3) Además, existen en México agrupaciones que buscan contrarrestar la falta de información entre la población, una de ellas es la que impulsa el Colegio Noreste de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva A.C. quienes recién lanzaron su sitio web www.cirugiaplasticasegura.com. Dicho portal, avalado por la Secretaría de Salud, ofrece información y contacto de los expertos certificados que se encuentran en Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila, Zacatecas y Durango.
Aunque no se saben cifras concretas sobre la prevalencia de esta situación, es muy probable que México se encuentre ante un problema de salud pública. Se recomienda por ello, invitar a la población en general, a realizar conciencia sobre los riesgos de este tipo de prácticas para evitar que la gente sea engañada.
Por ello, el experto comentó sobre la importancia de unir esfuerzos de educación dirigidos al público en general por parte de la comunidad médica, así como de los productos que sí cuentan con pruebas científicas para su uso sin riesgos en la salud como el caso de Dysport, la toxina botulínica francesa tipo “A” para el tratamiento de líneas de expresión y distonía aprobada por la Federal Drug Administration, FDA; así como por la Secretaría de Salud en México.
“Y es que los pacientes que han sido sometidos a la infiltración de alguna sustancia, que no ha demostrado bajo ninguna circunstancia un valor positivo para la salud y que busca “modelar” ciertas partes del cuerpo, presentarán en algún momento de su vida, reacciones locales de tipo inmunológicas a la misma sustancia” explicó el cirujano.
Los síntomas más comunes son: endurecimiento del sitio inyectado, dolor, inflamación de dicha zona, episodios de fiebre, cambios de coloración de la piel, salida de material por los sitios de punción, deformidad de la zona inyectada, entre otros; es vital que se acuda de inmediato con un profesional insistiendo en que sea éste, un calificado para ello.
Los síntomas pueden presentarse a corto o largo plazo (depende del tipo, la cantidad y la respuesta inmunológica a la sustancia). Se ha visto que las reacciones ocurren en la mayoría de los casos 15 a 20 años después del tratamiento, aunque en ocasiones los pacientes acuden a consulta a las pocas semanas para solicitar ayuda.
Quienes resultan más afectados por este tipo de engaños son las mujeres jóvenes de cualquier estrato social; siendo los senos, los glúteos, las piernas y la región facial las más comúnmente afectadas. Pero no por ello se ha dejado de ver este fenómeno en otro rango de edad o género.
Consejos básicos para someterse a un tratamiento estético:
1) Que el paciente asegure que se encuentra frente a un profesional certificado por la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica, A. C.; por el Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, A. C. o por cualquier otra agrupación que cuente con un valor académico serio.
2) Es común que aquellos que hacen charlatanería no cuenten con un lugar fijo de trabajo o bien cambien constantemente su lugar de aplicación, para que no se les pueda reclamar o perseguir.
3) Además, existen en México agrupaciones que buscan contrarrestar la falta de información entre la población, una de ellas es la que impulsa el Colegio Noreste de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva A.C. quienes recién lanzaron su sitio web www.cirugiaplasticasegura.com. Dicho portal, avalado por la Secretaría de Salud, ofrece información y contacto de los expertos certificados que se encuentran en Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila, Zacatecas y Durango.
Aunque no se saben cifras concretas sobre la prevalencia de esta situación, es muy probable que México se encuentre ante un problema de salud pública. Se recomienda por ello, invitar a la población en general, a realizar conciencia sobre los riesgos de este tipo de prácticas para evitar que la gente sea engañada.